En las escuelas, como parte de sus planes de estudio, a los jóvenes se les enseña que creer en Dios es anormal; los maestros los alientan a denunciar a sus familiares religiosos.
por Wang Anyang
Desde la aprobación el año pasado de los nuevos Reglamentos sobre Asuntos Religiosos, los cuales, entre otras cosas, prohíben que los niños asistan a lugares de culto, las escuelas de toda China han adoptado medidas sin precedentes para mantener a los estudiantes alejados de las cuestiones de fe. La preparación de los ateos comienza a edad temprana –desde los jardines de infantes y las escuelas primarias.
La política ha perjudicado a muchas familias: a los niños se les enseña a oponerse a sus familiares religiosos, los mismos sufren un gran estrés psicológico por temor a que sus padres o seres queridos sean arrestados por asistir a la iglesia. Varias familias comparten sus experiencias con Bitter Winter.
Un maestro afirma que el cristianismo es un xie jiao
El hijo de una mujer cristiana que asiste a la escuela primaria halló un folleto sobre cristianismo en su hogar. «Mi maestro dice que el cristianismo es un xie jiao. Si crees en ello, te irás de casa y no cuidarás de mí. También podrías inmolarte”, afirmó el niño con preocupación.
Posteriormente, sacó de su mochila un libro de texto escolar titulado “Moralidad y Sociedad”, y le mostró a su madre su contenido relacionado con los xie jiao. El texto también explica cómo oponer resistencia a estos grupos religiosos. «El maestro nos dijo durante la clase que los grupos xie jiao son nefastos», afirmó, mientras le pedía a su madre que rompiera el folleto religioso.
El Partido Comunista Chino (PCCh) ha catalogado a los grupos religiosos que crecen rápidamente y que no están bajo su control como xie jiao, castigándolos severamente. No obstante, muy a menudo, las autoridades utilizan la etiqueta de «enseñanzas heterodoxas» para reprimir iglesias domésticas cristianas y otros grupos religiosos que no forman parte de la lista de xie jiao. La práctica, al parecer, también se ha infiltrado en las escuelas para manipular y confundir a los jóvenes estudiantes. En los exámenes finales de escuelas primarias se han incluido preguntas relacionadas con los xie jiao.
Temerosa de causarle problemas a su hijo y a sí misma, la madre ocultó todos los símbolos religiosos y otros objetos relacionados con su fe. No obstante, ni siquiera esto alivió las tensiones con su hijo.
Un mes más tarde, cuando su hijo halló por casualidad otro folleto religioso en la bolsa de su madre, tomó con enojo un cuchillo de fruta de la cocina y le hizo varios agujeros. Sosteniendo el folleto perforado en el cuchillo, amenazó a su madre para que abandonara su fe, alegando que «el cristianismo es un xie jiao», y ella «no debía creer en eso».
La mujer se sintió conmocionada por el comportamiento agresivo de su hijo. ¿Cómo pudo su inocente y obediente hijo haberse vuelto tan retorcido? ¿Con qué exactamente la escuela había adoctrinado a su hijo?
«Antes de comenzar la escuela, le hablé a mi hijo sobre la creación de Dios, y él lo creyó. Pero después de haber recibido lecciones en la escuela, parece una persona diferente. En la China atea, a estos puros e inocentes niños se les ha enseñado a odiar a Dios», afirmó la cristiana con amargura.
Un compañero de escuela del niño afirmó que ahora tiene miedo de ver a las personas que forman parte de los grupos catalogados como xie jiao autoinmolarse, ya que un maestro le dijo a la clase que algunos son propensos a hacerlo.
Se incentiva a los niños a denunciar a sus padres
A finales de abril, una escuela primaria emplazada en la ciudad de Xinzheng, en la provincia central de Henán, celebró una reunión para estudiantes en la que se habló sobre cómo oponer resistencia contra la religión. Una directora les dijo a los estudiantes que debían ser ateos y nunca creer en la existencia de dioses. «Si su madre asiste a iglesia y cree en Dios, ya no los querrá como hijos», amenazó la maestra.
La maestra de otra escuela primaria emplazada en Xinzheng les mostró a los estudiantes una película de propaganda antirreligiosa animada, en la que los creyentes eran representados como monstruos negros. Además, les dijo que las personas religiosas podrían hechizarlos y que debían informar a la policía cada vez que descubrieran a un creyente.
El padre de un estudiante de la escuela dijo que su hijo inicialmente no se oponía a sus creencias religiosas, pero después de algunas clases, comenzó a comportarse completamente fuera de lugar, oponiéndose activamente a que su madre leyera libros religiosos. Los padres de otra estudiante revelaron que la misma se siente aterrorizada, ya que teme que la policía detenga a su madre cristiana.
Estudiantes de una escuela primaria emplazada en el condado de Linzhang, en la provincia norteña de Hebei, fueron obligados a supervisar a sus padres para asegurarse de que los mismos no participaran en ningún tipo de actividad religiosa. Como consecuencia de ello, un estudiante instó a su padre cristiano a no creer en Dios porque era anormal y peligroso. «Esto conduce a un callejón sin salida. Si asistes a reuniones, serás arrestado», afirmó el niño con preocupación.