A medida que se intensifica la campaña de “sinificación” del PCCh, las iglesias de las Tres Autonomías están siendo transformadas por la fuerza, perdiendo sus símbolos religiosos y cualquier semejanza con la arquitectura europea.
por Li Mingxuan
En el mes de marzo, Xu Xiaohong, presidente del Comité Nacional del Movimiento Patriótico de las Tres Autonomías de las Iglesias Protestantes, señaló en una conferencia que las iglesias en China debían liberarse de la “influencia occidental”. En respuesta a la política de “sinificación de la religión” del presidente Xi Jinping, las iglesias en China deben llevar el nombre de Zhong (China) y no Xi (el Occidente), proclamó. También dijo que los símbolos de las religiones extranjeras deben quitarse, y denunció a “las fuerzas extranjeras anti-China” por utilizar al cristianismo para perturbar la estabilidad social en el país.
Los comentarios del Sr. Xu han impulsado todavía más la campaña del régimen para “sinificar” a las iglesias de las Tres Autonomías controladas por el Gobierno que se había estado llevando a cabo a lo largo de China durante mucho tiempo. Los sitios religiosos bajo el control del Estado son “adaptados al socialismo y patriotismo chinos” al introducir propaganda del PCCh (Partido Comunista Chino) en los sermones, reemplazando cruces con símbolos comunistas, alterando de forma drástica el estilo arquitectónico de las construcciones y readaptándolas para actividades que no tienen nada que ver con la religión.
Capiteles de estilo europeo son desmantelados
A finales de abril, el Departamento de Trabajo del Frente Unido (DTFU) de la ciudad de Linyi en la provincia oriental de Shandong quitó por la fuerza una cruz de una iglesia de las Tres Autonomías en el distrito de Lanshan de la ciudad.
Cuando los funcionarios fueron a inspeccionar la iglesia a principios de junio, afirmaron que era demasiado grande –la iglesia de dos pisos tiene 800 metros cuadrados– y que su espacio debía reducirse, al menos, a un 25 por ciento. Los funcionarios también afirmaron que los tres capiteles de estilo europeo de la iglesia debían ser derribados.
Quince días después, el Gobierno comenzó a transformar la iglesia. Sus capiteles de estilo europeo fueron desmantelados y los cuatro caracteres chinos que significan “iglesia cristiana” fueron quitados de la entrada. También se hicieron cambios dentro de la iglesia. El lobby fue dividido en dos áreas: la mitad se dejó para las reuniones de la congregación y, la otra, se convirtió en un centro de actividades para adultos mayores. En el segundo piso, cerca de la mitad del espacio se convirtió en una oficina del comité del vecindario. De acuerdo con los creyentes de la iglesia, la totalidad de la compañía de gestión de propiedades del vecindario se mudará a la iglesia en el futuro.
Fuentes gubernamentales confirmaron que el DTFU está alterando las iglesias como parte de la campaña de desoccidentalización que tiene como objetivo resistirse a las influencias religiosas extranjeras sobre los creyentes chinos.
“No podemos pelear contra el Gobierno. Necesitamos hacer las alteraciones que el DTFU nos diga que hagamos. De otra manera, nuestro sitio de reunión será cerrado”, dijo con impotencia un creyente de la iglesia, y añadió que Xi Jinping está siguiendo el camino de Mao Zedong, el cual, durante su mandato, quiso destruir la fe de las personas.
El Partido Comunista sustituye a la religión
Una iglesia de las Tres Autonomías que contaba con todos los permisos necesarios en el poblado de Gaojialing del condado de Poyang, en la provincia suroriental de Jiangxi, también pasó por cambios drásticos. La cruz de la iglesia fue quitada en marzo y, en mayo, funcionarios locales ordenaron alterar su apariencia porque la construcción tenía varios capiteles en el techo y declaraciones y símbolos religiosos grabados en su pared frontal.
La persona encargada de la iglesia recibió la instrucción de llevar a cabo los cambios y, si no lo hacía, la iglesia sería demolida. Los funcionarios proclamaron que el cristianismo debía apegarse a los principios del socialismo chino y que la población debía estudiar la cultura china y creer en el Partido Comunista y no en “el Jesús de los extranjeros”.
Para salvar a la iglesia, la persona encargada no tuvo otra opción más que quitar los capiteles de la iglesia y los caracteres chinos que significan “Dios ama al mundo”, “cristianismo” y otras palabras y símbolos religiosos de la fachada. Posteriormente, se colgaron a ambos lados de la entrada de la iglesia proclamas que dicen “Se prohíbe a personal externo predicar” y “Los menores de edad no serán admitidos en las prácticas religiosas”.
Al ver la transformación forzada de la iglesia, un predicador local comentó que el Gobierno está desmantelando cruces y alterando la apariencia de las iglesias en grandes cantidades porque tiene miedo de la propagación del cristianismo y que pueda interferir con el gobierno totalitario del PCCh. De ahí que los funcionarios vayan a las casas de los cristianos, coloquen retratos de Mao Zedung y Xi Jinping y den sermones de que el Partido reemplaza a la religión: a las personas sólo se les permite creer en el Partido.
El poblado de Guxiandu en el condado de Poyang tiene 26 iglesias. El Gobierno local proclamó que el número era demasiado alto y debía reducirse. Comenzaron el proceso cambiando su apariencia. Uno de los lugares de adoración transformados fue la iglesia de Sanyuan: en marzo, su cruz fue desmantelada, tres capiteles fueron quitados y la barda perimetral de la iglesia fue derribada.