La policía china lanzó una operación nacional contra Bitter Winter. Reporteros y otras personas que nos enviaron información fueron arrestados y, a la vez, se están difundiendo falsos rumores sobre nuestra revista.
Recibimos informes desde China que, irritada por la publicación de noticias y documentos confidenciales en Bitter Winter, la policía lanzó una campaña a nivel nacional para descubrir quién le está dando información a nuestra revista. Por desgracia, algunos valientes reporteros y otras personas que, con gran riesgo para su libertad personal, habían enviado información, fotografías y documentos a Bitter Winter han sido arrestados. Saludamos a estas valientes víctimas de la lucha por los derechos humanos y la libertad de información en China, y seguiremos llamando la atención de la comunidad internacional sobre la brutal represión de las libertades básicas en China.
Sabemos que la propaganda china está diciendo que Bitter Winter es una operación anti-China dirigida desde la sombra por grupos catalogados como xie jiao (“enseñanzas no ortodoxas”, la traducción usada actualmente “cultos malvados” no es correcta) como, por ejemplo, Falun Gong, los Gritadores, la Iglesia de la Realización Completa y la Iglesia de Dios Todopoderoso. También nos han dicho que se han creado documentos falsos “probando” esas acusaciones y esperamos que pronto salgan a la luz.
El día que comenzamos Bitter Winter, la presentamos como un “proyecto de cooperación entre especialistas, activistas de derechos humanos y miembros de las organizaciones religiosas en China”. Declaramos lo obvio: los informes sobre la persecución a menudo provienen de los mismos movimientos que están siendo perseguidos, incluyendo a aquellos que han sido catalogados como xie jiao. Pero recibimos informes de una gran variedad de fuentes, como lo demuestra nuestra cobertura de problemáticas de católicos y musulmanes que no están relacionados con el tema de los xie jiao, y del frecuente maltrato que sufren los creyentes de la Iglesia de las Tres Autonomías, controlada por el gobierno.
Bitter Winter es una publicación del CESNUR, Centro de Estudios sobre las Nuevas Religiones. Tenemos un historial de treinta años siendo una voz para la seriedad académica y la libertad religiosa. Los regímenes totalitarios y otros enemigos de la libertad religiosa nos han acusado de ser miembros prácticamente de cualquier “culto” que se les ha ocurrido, lo cual es irónico dado que el director administrativo de CESNUR es católico; su presidente, un sacerdote católico; y uno de los miembros de su equipo directivo, un ministro metodista ordenado. No nos han intimidado anteriores campañas de noticias falsas y ciertamente tampoco nos intimidará esta.
