El PCCh prohíbe estrictamente que los menores tengan contacto con la religión, y debido a ello, las iglesias se convierten en zonas prohibidas para los niños. Incluso durante sus descansos lectivos.
por Tang Wanming
Intentando eliminar cualquier tipo de oportunidad para que los menores tengan contacto con la religión, el Partido Comunista Chino (PCCh) ha prohibido el surgimiento de actividades, información y símbolos relacionados con la fe en los establecimientos educativos. El Estado también controla sus vidas fuera de los mismos. En China, los estudiantes de escuelas primarias y secundarias tienen sus vacaciones de verano entre junio y agosto, y los campamentos de verano y otras actividades infantiles relacionadas con la religión están siendo ininterrumpidamente reprimidos.
Una escuela emplazada en la provincia norteña de Hebei emitió recientemente una notificación en la que se les prohibía a los estudiantes participar en actividades religiosas y se establecían estrictas regulaciones que debían ser respetadas por los mismos. «En lo que respecta a los estudiantes que se ausenten sin motivo, su maestro deberá ponerse en contacto con sus padres de inmediato y verificar el motivo de tal ausencia», afirma el anuncio. Durante las vacaciones de invierno y verano, las escuelas les envían cartas a los padres, recordándoles que deben fortalecer la supervisión de sus hijos y evitar que asistan a lugares religiosos para tomar clases de estudio de las Sagradas Escrituras o participar en cualquier tipo de formación teológica.
Los padres recibieron y debieron firmar una notificación en la que se prohibía que los estudiantes participaran en actividades religiosas.
Se reprimen las actividades religiosas de los campamentos de verano
El 15 de julio, la policía allanó un campamento de verano organizado por un lugar de reunión perteneciente a la Iglesia de las Tres Autonomías emplazado en la ciudad de Foshan, en la provincia sureña de Guangdong. Según fuentes, más de 80 personas participaban en el campamento. Mientras los niños jugaban, de repente, decenas de policías rodearon el lugar de reunión. Los niños más pequeños estaban tan asustados que comenzaron a llorar desconsoladamente. La policía registró la información de cada niño, anotó las escuelas a las que asistían y arrestó al pastor y a seis fieles, los cuales fueron liberados más tarde ese mismo día.
Video: Mientras se celebraba un campamento de verano, la policía allanó un lugar de reunión perteneciente a la Iglesia de las Tres Autonomías emplazado en la ciudad de Foshan.
El 6 de julio, cuatro funcionarios gubernamentales irrumpieron en el sitio donde se estaba celebrando un campamento religioso de verano organizado por una iglesia emplazada en la ciudad de Lushan, en la provincia suroriental de Jiangxi. Los funcionarios tomaron fotos de los 37 jóvenes que asistían al campamento y les exigieron dispersarse.
“Por sus venas corre sangre china. Los chinos cultivaron la comida que comen. No deben adorar las religiones de los occidentales», afirmó un oficial de policía mientras regañaba a los estudiantes.
Uno de los creyentes de la iglesia comentó que ver a los oficiales dispersando a las personas por la fuerza dejará durante mucho tiempo una cicatriz psicológica en los niños.
La Iglesia de Yaofeng, situada en la ciudad de Fuzhou, en la provincia suroriental de Fujian, inicialmente tenía previsto llevar a cabo actividades de campamento de verano en el mes de agosto. No obstante, varios funcionarios se presentaron en tres oportunidades para advertirles que los niños están bajo la administración del Gobierno y que la Iglesia no debe intervenir.
Las instituciones de formación dirigidas por cristianos también son reprimidas
La represión también se extiende a las instituciones educativas operadas por cristianos. El «Árbol de la vida» es un instituto de formación educativa operado legalmente en la ciudad de Xiamen, en Fujian, el mismo fue fundado en el año 2016, cuenta con más de 100 estudiantes y ofrece clases de inglés, artes y temas afines. Desde su fundación, la afectuosa enseñanza brindada por los maestros cristianos ha ganado elogios y el reconocimiento unánime de los padres.
Pero en el mes de abril, la Agencia de Educación de la ciudad de Xiamen les envió una advertencia a los maestros y a los padres de estudiantes de algunas escuelas locales, afirmando que, el «Árbol de vida» cuenta con «cursos insalubres» y problemas de seguridad contra incendios, instando a los padres a retirar a sus hijos de dicho instituto de formación. Algunos padres incluso se vieron obligados a firmar una declaración garantizando que sus hijos no asistirán a clases en dicho establecimiento. Otros anularon la inscripción de sus hijos en los cursos por temor a que desobedecer al Gobierno podría poner en peligro el futuro de sus hijos.
Un infiltrado en el Gobierno reveló que la principal razón por la cual el instituto de formación «Árbol de la vida» fue investigado fue la religión.
Algunos padres consideran incomprensible el enfoque adoptado por el Gobierno. «La práctica del Gobierno de reprimir grupos conformados por personas tan solícitas es realmente repugnante», afirmó uno de los padres.
Una iglesia de las Tres Autonomías casi fue clausurada debido a que había niños jugando afuera de sus instalaciones
El 9 de junio, funcionarios gubernamentales procedentes de la ciudad de Shangqiu, en la provincia central de Henán, irrumpieron inesperadamente en una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en el distrito de Liangyuan de la ciudad, alegando que habían visto en un video de vigilancia a dos niños jugando al lado de un bloque de piedra situado frente a la entrada de la misma. Como consecuencia de ello, los funcionarios intentaron confiscar el permiso de la iglesia y prohibirle continuar celebrando reuniones.
“De hecho, el bloque de piedra se encuentra situado a más de diez metros de la entrada de la iglesia. Los funcionarios gubernamentales afirmaron que estaba bien si los niños pasaban ocasionalmente por allí. Pero si los mismos son llevados por los creyentes, la iglesia será sellada. El PCCh tiene la última palabra. La gente tiene que acatar sus órdenes en todos los aspectos”, se quejó uno de los miembros de la congregación.
Tras verificar la situación, los funcionarios gubernamentales advirtieron que, si descubren que los creyentes llevan niños a la iglesia, el edificio y todas las finanzas de la misma serán confiscados.