El régimen intensifica el control sobre las finanzas de las iglesias aprobadas por el Estado como una herramienta para limitar las actividades religiosas al mínimo y, en última instancia, hacerse cargo de ellas por completo.
por Jiang Tao
Además del sofocante control de las actividades religiosas y del personal de las iglesias aprobadas por el Estado, la supervisión de sus finanzas ha sido uno de los principales métodos a través de los cuales el Gobierno chino ha estado reprimiendo los lugares de culto: desde la vigilancia de las cajas de donaciones y las restricciones en los gastos hasta la incautación total de fondos.
Las crecientes limitaciones relacionadas con la forma en la que las iglesias pueden utilizar las donaciones y administrar sus finanzas en general se hacen evidentes en varios documentos internos adoptados por todos los niveles de Gobierno en todo el país y en las nuevas medidas puestas en marcha por ellos.
En el mes de julio se distribuyeron paneles especialmente preparados en más de una docena de lugares de reunión autorizados por el Estado emplazados en el poblado de Zhutian, administrado por el condado de Fei de la ciudad de Linyi, en la provincia oriental de Shandong. Los paneles, titulados «Detalles públicos de las donaciones en los lugares de actividad religiosa del condado de Fei», enumeran las sumas de dinero, representando denominaciones de billetes del 1 al 100, que deberán ser ingresadas por los administradores de las iglesias luego de haber contado el dinero de las donaciones. Incluso se deberá publicar la cantidad de monedas encontradas en las cajas de donación.
En un país democrático, tales medidas pueden parecer un esfuerzo llevado a cabo en pos de garantizar la transparencia, no así en China. La reciente campaña del régimen tiene un objetivo diferente: imponer más medidas de control sobre la vida cotidiana de los creyentes y sus prácticas religiosas.
Según feligreses locales, los paneles fueron publicados por miembros del personal de la Oficina de Gestión Integral del poblado de Zhutian, y en los mismos se les exige a las iglesias que ingresen en ellos la cantidad de dinero existente en las cajas de donación luego de cada servicio dominical. Luego de ingresar la información en los paneles, los mismos deberán ser fotografiados y dichas fotos deberán ser enviadas a las autoridades. Para asegurarse de que los datos ingresados sean precisos, administradores de la red se encargarán de supervisar el proceso tomando fotos.
En otras provincias se han aplicado medidas similares de gestión del dinero de las donaciones. Miembros del personal de iglesias protestantes y católicas aprobadas por el Gobierno emplazadas en la provincia central de Henán le han proporcionado a Bitter Winter reglamentos gubernamentales sobre la gestión financiera de sus lugares de reunión.
Entre ellos, el 7 de diciembre de 2018, el Comité de Asuntos Étnicos y Religiosos de Henán emitió las Medidas (de prueba) para la supervisión financiera y la gestión de lugares de actividad religiosa. El edicto estipula que el dinero recibido por los lugares religiosos deberá ser depositado en una cuenta bancaria destinada al dinero procedente de las donaciones de cada iglesia el mismo día en que es recibido. Los lugares religiosos deberán presentar periódicamente informes financieros detallados, entre los que se incluyen un balance general, un estado de actividades financieras, un estado de flujo de caja y un acuerdo de aceptación y uso de donaciones a los departamentos de asuntos religiosos, los cuales revisarán estos informes y «en caso de que se descubra algún problema, instarán y guiarán rápidamente a los lugares religiosos para que los mismos efectúen autoexámenes y rectificaciones».
Medidas (de prueba) para la supervisión financiera y la gestión de lugares de actividad religiosa.
El artículo 41 de las Medidas prevé que los Gobiernos a nivel municipal podrán establecer «equipos de gestión de asuntos religiosos» compuestos por cuadros rurales del Partido Comunista Chino (PCCh) para que efectúen diariamente la supervisión de las finanzas y otros asuntos de los lugares religiosos.
Colección de reglamentos de gestión financiera y contable para los lugares católicos emplazados en la provincia de Henán.
El encargado de una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en el condado de Xiayi, administrado por la ciudad de Shangqiu, en Henán, le dijo a Bitter Winter que las medidas están siendo plenamente implementadas.
“Todos somos conscientes de esto. Ellos auditan nuestras cuentas y nos obligan a presentar informes” afirmó el encargado. “Esto se está haciendo para controlar el dinero de la iglesia. Luego de terminar las reuniones dominicales, a las 11 de la mañana, tenemos que contar y registrar las donaciones frente al secretario de la aldea, quien registra el proceso con su teléfono inteligente. Se supone que las donaciones deberían ser utilizadas para apoyar y nutrir a los creyentes y para difundir el evangelio, pero el PCCh no lo permite. No nos permiten visitar y ayudar a los creyentes, e incluso afirman que hacerlo podría ser considerado una actividad ilegal. Solo se nos permite utilizar las donaciones para comprar materiales propagandísticos que promuevan la ideología del PCCh o libros sobre la cultura tradicional china. Siempre y cuando los compremos, el PCCh dirá que está bien, sin importar cuánto gastemos. A través de estas medidas, se aseguran de que la iglesia no pueda seguir creciendo”.
Fragmento del documento titulado: Medidas (de prueba) para la supervisión financiera y la gestión de lugares de actividad religiosa cristianos emplazados en la provincia de Henán.
Un colaborador de la iglesia añadió que la misma no podía organizar actividades para Navidad o imprimir folletos evangelizadores si el Gobierno no aprobaba los gastos relacionados. «Si te atreves a tomar dinero directamente de los creyentes, y el PCCh se entera de ello, podrías ser acusado de ‘participar en recaudación ilegal de fondos y corrupción’”, explicó el colaborador.
El encargado de una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la ciudad de Yongcheng de Henán se quejó, afirmando que a las autoridades no les importa cuánto dinero de la iglesia se gasta en las actividades y cosas que aprueban. “Tuvimos que gastar más de 10 000 yuanes [alrededor de 1400 dólares] del dinero de las donaciones a fin de prepararnos para una inspección gubernamental, solo para decorar la iglesia y comprar cigarrillos y alcohol para los funcionarios gubernamentales. Si no estás de acuerdo en hacer estas cosas, clausurarán la iglesia», afirmó el mismo.