El PCCh está intensificando los esfuerzos para ejercer más control sobre los musulmanes de etnia hui dispersos por todo el país, reprimiendo su fe y eliminando su cultura tradicional.
por Zheng Jie
Al ser aclamados como los musulmanes «buenos» que se han integrado adecuadamente en el sistema oficial de China durante las últimas décadas, los musulmanes de etnia hui se han librado del tipo de persecución a la que están sometidos los uigures y otras minorías en Sinkiang. No obstante, con la legislación recientemente adoptada por el Partido Comunista Chino (PCCh), cuyo objetivo es «sinizar» a todos los musulmanes que vivan fuera de Sinkiang en un plazo de cinco años, el pueblo hui también comenzó a sentir la pesada mano de la persecución del régimen.
Se eliminan los símbolos musulmanes y las escrituras en árabe
Tal y como Bitter Winter ha informado ampliamente, los carteles escritos en árabe y los símbolos islámicos han sido eliminados de las áreas públicas de regiones que cuentan con grandes poblaciones de personas de etnia hui, como por ejemplo las provincias de Gansu, Shandong, Henán y la Región Autónoma Hui de Ningxia.
La hermosa y vibrante ciudad a nivel de prefectura de Ordos, situada en el sureste de Mongolia Interior, también está sufriendo en medio de la actual campaña antimusulmana. El 29 de octubre de 2019, la Asociación Islámica del distrito de Dongsheng de la ciudad emitió un aviso, exigiéndoles a los gerentes de todos los restaurantes halal bajo su jurisdicción que retiraran los letreros y todas las decoraciones escritas en árabe y con símbolos islámicos en el plazo de una semana.
La mezquita de Dongsheng, un importante lugar de culto para los musulmanes locales, la cual también alberga un restaurante halal, no ha podido escapar de la persecución gubernamental: algunos de sus símbolos han sido eliminados mientras que otros fueron cubiertos.
La misma suerte corrió el distrito de Donghe en la ciudad de Baotou de Mongolia Interior habitado por personas de etnia hui, donde la mayor parte de los símbolos islámicos fueron eliminados o rectificados. Según algunos cálculos, entre los meses de octubre y noviembre se eliminaron los escritos en árabe situados en el interior y el exterior de 296 comercios, se prohibió la vajilla con símbolos halal en los restaurantes y se eliminaron los símbolos árabes de los menús.
Varios comerciantes del distrito le dijeron a Bitter Winter que los funcionarios gubernamentales no presentaron ningún tipo de documentación que explicara el motivo por el cual los símbolos tuvieron que ser eliminados. Solo gritaron «esta es la política del Partido Comunista». «Las políticas religiosas de Xi Jinping son más severas que las de Mao Zedong», afirmó uno de los comerciantes. «¿De qué manera afectan estos símbolos al Gobierno?».
Según un documento interno emitido por un Gobierno provincial de la región occidental de China, «la generalización de lo halal no es simplemente una cuestión de costumbres religiosas», sino «un asunto serio que concierne a la cultura e incluso a la política». Además, durante sus visitas a regiones pobladas por personas de etnia hui, el presidente Xi Jinping ha exigido explícitamente que «el uso excesivo de símbolos halal sea tratado y frenado».
“La situación está empeorando. Un día, funcionarios del Gobierno local vinieron a inspeccionar mi tienda tres veces”, afirmó otra comerciante procedente de Baotou. Las frecuentes visitas y otras formas de acoso están haciendo que la mujer se sienta sumamente nerviosa y, debido a ello, no está segura de cuánto tiempo más podrá mantener su negocio.
Una escuela islámica fue clausurada en la ciudad de Heze
El PCCh ha subrayado repetidamente en sus documentos confidenciales la necesidad de tomar medidas enérgicas contra los centros educativos que imparten enseñanza en árabe, especialmente aquellos que ofrecen instrucción religiosa.
El 6 de noviembre de 2019, una escuela privada emplazada en Heze, una ciudad a nivel de prefectura de la provincia oriental de Shandong, se vio obligada a cerrar sus puertas luego de más de 30 años de enseñar el Corán a musulmanes de toda China. Tras graduarse, los estudiantes de la escuela solían ser enviados a varias zonas de China para que se desempeñaran como imanes. Pero ahora se les dijo a los maestros y estudiantes que debían marcharse, y la mayor parte de ellos tuvieron que regresar a sus pueblos de origen. Los símbolos de luna creciente existentes en la escuela fueron eliminados o cubiertos con pintura.
“El PCCh se comporta de manera sumamente cruel y despiadada al prohibirnos cultivar estudiantes del islam. Pronto no tendremos más imanes en las mezquitas, lo que significa que en China se extinguirá la fe musulmana», afirmó con preocupación un hombre de etnia hui procedente de Heze.