En medio de la campaña nacional de remoción de cruces del PCCh, una iglesia estatal y una iglesia doméstica emplazadas en una aldea de la provincia de Zhejiang fueron atacadas por guardias de seguridad contratados por el Gobierno.
por Zhao Mingzhe
Poco después de las 4 de la madrugada del 7 de julio, funcionarios del Gobierno del condado de Yongjia en la ciudad de Wenzhou de la provincia de Zhejiang enviaron a más de 100 trabajadores a la aldea de Yongfu para que retiraran las cruces de dos iglesias. Testigos presenciales informaron que la mayor parte de los trabajadores encargados de la demolición vestían uniformes de una empresa de seguridad privada.
Un miembro de la iglesia estatal, la primera en ser atacada, le dijo a Bitter Winter que los funcionarios cortaron el candado que estaba colocado en la puerta de la iglesia para poder ingresar a la misma. Tras enterarse de ello, los creyentes inmediatamente se dirigieron a la iglesia para proteger su cruz. Un congregante de aproximadamente 80 años se paró frente a los guardias, pero los mismos lo arrojaron al suelo, hiriendo uno de sus brazos. Otros miembros de la iglesia también fueron atacados y golpeados.
Video: durante el enfrentamiento, un hombre de aproximadamente 80 años fue arrojado al suelo y resultó herido.
Según los creyentes locales, durante las represiones perpetradas contra las iglesias de Zhejiang en los años 2014 y 2015, cuando en la provincia se eliminaron más de 1700 cruces, la cruz de la iglesia pudo seguir en pie solo porque la congregación logró protegerla. No obstante, esta vez no pudieron salvarla: la misma fue derribada a las 6 y media de la mañana, y los guardias de seguridad prohibieron que la congregación filmara la escena.
Poco tiempo después, el director y el predicador de la iglesia fabricaron una cruz de madera para reemplazar la que había sido eliminada, pero fueron denunciados ante las autoridades, quienes amenazaron con demoler la iglesia si descubrían una nueva cruz.
«Los mismos demolieron la cruz en secreto, cuando estábamos desprevenidos», comentó un miembro de la congregación. «Actúan como una banda de bandidos».
Video: la cruz de una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la aldea de Yongfu está siendo removida.
Luego de haber quitado la cruz de la iglesia de las Tres Autonomías, los mismos guardias de seguridad fueron enviados a quitar la cruz de una iglesia doméstica emplazada en la aldea. En un intento por salvarla, los creyentes cerraron con candado todas las entradas de la iglesia, pero esto no detuvo a los atacantes.
«Hicieron palanca y abrieron los tres candados utilizando una sierra de acero y un martillo de hierro, y nos expulsaron de la iglesia», recordó un miembro de la congregación. El creyente añadió que los guardias bloquearon todos los caminos que conducían a la iglesia para evitar el ingreso a la misma. Luego subieron al techo y derribaron la cruz.
«El Partido Comunista hace uso de la violencia para reprimirnos y demoler nuestros símbolos solo porque temen que el cristianismo represente una amenaza para su régimen», añadió otro creyente. «Nunca podrán quitar la cruz de nuestros corazones».
Tal y como informó Radio Asia Libre en su artículo publicado el 8 de julio, la policía monitoreó los teléfonos móviles e internet en la aldea ese día. «No puedo aceptar una entrevista porque mi teléfono móvil está siendo monitoreado. No puedo efectuar comentarios irresponsables», fueron los comentarios de un creyente local, según se citó en el artículo.
Las campañas masivas de demolición de cruces se están extendiendo a lo largo de toda China. De enero a abril, se eliminaron las cruces de al menos 250 iglesias de las Tres Autonomías emplazadas en Lu’an, Ma’anshan, Huaibei y otras ciudades de la provincia oriental de Anhui. Se eliminaron numerosas cruces de iglesias emplazadas en Shangrao, Nanchang y otras ciudades de la provincia suroriental de Jiangxi.
En Linyi, la mayor ciudad a nivel de prefectura de la provincia oriental de Shandong, desde marzo del año pasado hasta el pasado mes de enero, se eliminaron las cruces de al menos 70 iglesias, y la campaña continuó en medio del brote de coronavirus.