Las autoridades se negaron a emitir visas de turista a ciudadanos que desean visitar Corea del Sur.
por Jiang Tao
Tras la implementación del nuevo Reglamento de Asuntos Religiosos, a los ciudadanos chinos de fe cristiana les resulta difícil obtener permiso para viajar fuera de China.
Según fuentes internas, Chen Li (seudónimo), quien es residente de la ciudad de Weihai en la provincia de Shandong y cristiano, formó un grupo con otros diez miembros de su iglesia para viajar a Corea del Sur en abril de este año. En ese mismo mes, solicitaron visas de turista haciendo mención de su fe en los formularios. La agencia de viajes que gestionaba su viaje, informó a las autoridades y a todos se les negaron las visas.
Más tarde, la policía convocó al grupo y cada persona fue interrogada de manera individual. Todos eran sospechosos de viajar por algo más que sólo turismo y fueron advertidos contra la colaboración con el «enemigo».
Un mes después, dos mujeres de la misma iglesia solicitaron visas para viajar a Jerusalén, pero nuevamente se les negó el permiso. Las relaciones amistosas entre los Estados Unidos de América e Israel probablemente fueron las razones esta vez: según las autoridades, visitar Israel es indicativo de tendencias proamericanas.
Un abogado veterano confirma que tales restricciones son ilegales, y de acuerdo con el Artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, las personas tienen derecho a la libertad de movimiento. El Gobierno Chino ha firmado esta declaración, pero las autoridades se niegan a seguir estos principios.