Bitter Winter entrevistó a un miembro del personal de un campamento de “transformación por medio de educación” que reveló detalles sobre las condiciones de vida de 12 000 detenidos que se encuentran ahí.
Un miembro del personal de un campamento de “transformación por medio de educación” en el condado de Huocheng, de la Región Autónoma Uigur de Sinkiang, habló con DH con la condición de permanecer en el anonimato.
De acuerdo con él, aproximadamente 8000 hombres y 4000 mujeres están actualmente detenidos en el campamento; el detenido más joven tiene 18 años de edad y el más grande tiene más de 70.
La mayoría de los detenidos en este campamento son uigures. Hay algunos con antecedentes kazajos y unos cuantos chinos de etnias hui y han.
Los detenidos son separados por sexo y divididos en grupos de aproximadamente 60 personas. Cada grupo es dirigido por un instructor que habla mandarín, acompañado por dos asistentes. Los detenidos son forzados a leer sobre las políticas y los compromisos antirreligiosos del Partido Comunista Chino.
El miembro del personal dijo al reportero: “Durante varios meses, las personas han sido traídas continuamente y ninguno se ha ido todavía. Ya que el número de detenidos está en constante aumento, el campamento pronto puede ser ampliado para albergarlos. De hecho, los proyectos de construcción en Yining, que hace frontera con el condado, se han detenido y todos los esfuerzos se están dirigiendo a construir más campamentos”.
El empleado equipara los campamentos con prisiones y admite que las condiciones de vida al interior son bastante terribles.
Para las comidas, a los detenidos se les da pan y sopa de verduras. Cuando no hay sopa, se les da una taza pequeña e insípida de té con leche. Si alguien alguna vez pide agua, el personal del campamento normalmente lo ignora.
Los baños están dotados con cámaras de vigilancia, así que no hay ni un milímetro de privacidad ni para hombres ni para mujeres en el campamento.
Hasta el personal del campamento debe pasar por cuatro capas de seguridad antes de poder ingresar a la parte “educativa”. Las puertas de seguridad han sido deliberadamente designadas para ser estrechas, con el fin de impedir que las personas se escapen. En el caso de un incendio o una emergencia relacionada, sería prácticamente imposible que los detenidos fueran evacuados de forma segura a tiempo.
Informado por Li Zaili