Xin Zhuo era cristiano y participaba en una iglesia doméstica de Wudang, un pueblo en el distrito de Ongnuid, ciudad de Ulanhad, Mongolia Interior. Comenzó a profesar su fe en 1998 y llamó la atención de la policía local por su prédica constante. Fue detenido, pero siguió predicando y evitando por muy poco detenciones en varias ocasiones.
Una mañana de mayo de 2012, la policía de Wudang entró por la fuerza en casa de Xin Zhuo y se lo llevó a la comisaría. Según una fuente bien informada, en los pocos días en que Xin Zhuo estuvo bajo custodia, la policía lo golpeó salvajemente y lo interrogó bajo tortura ocasionándole heridas graves. Pocos días después del interrogatorio, al percatarse de la gravedad de las heridas de Xin Zhuo y temer que su muerte en comisaría les causara problemas, los policías le pidieron a la familia de Xin Zhuo que pagara una multa de 1500 yuanes (unos 220 dólares) a cambio de su liberación. Xin Zhuo fue liberado con la nariz ensangrentada y la cara hinchada. Se distraía a menudo con la mirada perdida en el espacio, parecía una persona completamente diferente.
Cuando Xin Zhuo regresó a casa, comenzó a pasar mucho tiempo en su kang (lecho calefactado), no se levantaba, no comía ni bebía, sólo decía incoherencias. A veces se levantaba de golpe en medio del sueño y gritaba repetidamente: “La gente del buró de seguridad pública ha venido a buscarme de nuevo. ¡Rápido, escóndame, tengo miedo!” Los familiares y amigos de Xin Zhuo estaban muy angustiados por su estado y se preguntaban qué tipo de torturas habría sufrido durante su detención.
Cuando los miembros de la iglesia de Xin Zhuo supieron que había sido liberado, fueron a visitarlo, pero para entonces, la mente de Xin Zhuo ya no estaba bien y, cuando vio a la gente que había ido a visitarlo, comenzó a gritar. Unos diez días después, Xin Zhuo falleció trágicamente a la edad de 67 años. Una fuente dijo: “La policía lo torturó hasta que lo mató y punto”.
Informado por Gu Qi