Cientos de cristianos de toda China fueron arrestados durante una gran congregación religiosa en la provincia de Hubei.
Una cristiana llamada Xu Meilan, perteneciente a una Iglesia doméstica de la zona de desarrollo de alta tecnología de Xian’an, ciudad de Xianning, provincia de Hubei, invitó a más de 500 cristianos de su Iglesia a una reunión, el 17 de diciembre de 2017. Ese día, llegaron al lugar más de 300 personas. Alrededor de la medianoche, en respuesta a un aviso, el gobierno local movilizó a más de 40 policías locales para asaltar el lugar de congregación.
Sin presentar ningún documento, la policía arrestó por la fuerza a Xu Meilan y al líder de la Iglesia, Yu Hui, alegando que estaban «celebrando una reunión ilegal», y los llevaron a la estación de policía local. Los otros 300 cristianos procedentes de las provincias de Anhui y Jiangxi, así como del condado de Tongshan, del condado de Yangxin en la provincia de Hubei, y de otras regiones, fueron interrogados individualmente mientras los oficiales tomaban nota de su información personal y de sus declaraciones. Luego, la policía transfirió a los cristianos a las estaciones de tren y autobús en medio de la noche y los obligó a regresar a sus hogares.
A las 4 de la tarde del día siguiente, dos agentes de policía interrogaron reiteradamente a Xu Meilan acerca de dónde provenían todos los miembros de la congregación, cómo los había notificado, cómo se conocían, quién era el líder, etc., pero Xu no proporcionó ninguna respuesta directa. Luego, la policía trató de intimidar a Xu y obligarla a renunciar a su fe, diciendo que el empleo de sus hijos se vería afectado y que su hogar sería allanado. Después de detenerla durante cinco días y obligarla a pagar 200 yuanes en concepto de gastos de manutención, la policía la liberó y le advirtió: «¡La próxima vez que te atrapemos, serás enviada a prisión!»
Al día siguiente, más de 40 oficiales de policía de la estación de policía local continuaron su vigilancia fuera de la casa de Xu Meilan. Esa noche, la policía arrestó a 160 personas más que asistían a la reunión; más personas fueron detenidas en días posteriores, contabilizando un total de al menos 500 creyentes. Entre ellos, el más joven tenía tres años, y el mayor tenía setenta y tantos años.
Informado por Shen Xiang