Un arco conmemorativo emplazado en una de las cuatro montañas sagradas del budismo chino ha sido demolido por la fuerza y el presidente de la Asociación Budista del Monte Jiuhua fue puesto bajo arresto domiciliario.
El arco del Monte Jiuhua, emplazado en el condado de Qingyang de la ciudad de Chizhóu, en la provincia oriental de Anhui, fue demolido por la fuerza el 19 de octubre. El mismo había sido construido en el año 1994 luego de que el Sr. Ji Lianghua, procedente de Hong Kong, donara 380 000 yuanes (más de 55 000 dólares) para su construcción.
Fuentes procedentes del Gobierno confirmaron que el presidente de la Asociación Budista del Monte Jiuhua había sido puesto bajo arresto domiciliario en su residencia del Palacio Baisui, el cual también había sido allanado.
El arco conmemorativo demolido estaba situado a la entrada del Monte Jiuhua. Un monje budista local afirmó que su destrucción había asestado un duro golpe a la reputación de Monte Jiuhua en su carácter de sitio budista sagrado. Él añadió que siguiendo su política de «sinificación», el Partido Comunista Chino ya había izado una bandera nacional en cada templo del Monte Jiuhua, y había colocado afiches con los «valores socialistas fundamentales», así como también el nuevo Reglamento Sobre Asuntos Religiosos en los muros de todos los sitios de culto.
Según el monje, el Gobierno ahora ha prohibido la quema de barras de incienso grandes en los templos. A cada fiel budista solo se le permite quemar tres varitas de incienso del tamaño más pequeño, y funcionarios gubernamentales llevan a cabo inspecciones para garantizar el cumplimiento de dicho lineamiento.
Muchos monjes ya han sido expulsados de los templos del Monte Jiuhua y la casa de huéspedes Dabeilou emplazada en el área ha sido demolida. Una estatua de Buda tallada en una cueva ha sido destrozada.
A principios de octubre, las autoridades incautaron incienso de 40 tiendas budistas situadas en la calle Wuxi, al pie del Monte Jiuhua, y estas se vieron obligadas a cerrar. Según la propietaria de una de estas tiendas, durante la incautación de incienso, un miembro del personal gubernamental le dijo que el budismo era considerado un xie jiao (enseñanza heterodoxa), y que las tiendas tenían prohibido quemar o vender incienso. El propietario de otra tienda afirmó con impotencia: «Tratar de resistirse a las instrucciones del Gobierno central es como coquetear con la muerte».
Todos los letreros de las tiendas locales que contenían el carácter chino para «Buda/Budismo» (Fó) han sido eliminados o modificados, dando como resultado un carácter diferente (fú), el cual significa «no».
La represión contra los budistas está siendo llevada a cabo por los Departamentos de Seguridad Pública y Gestión Urbana. Según información reciente, 17 templos emplazados en el distrito de Guichi de la ciudad de Chizhóu, situada al sur de Anhui, están siendo clausurados o demolidos.
Información de Jiang Tao