Una miembro de la Iglesia de Dios Todopoderoso fue golpeada y obligada a identificar a otros creyentes mientras se encontraba detenida.
En China, la Iglesia de Dios Todopoderoso (IDT) es el nuevo y más extenso movimiento religioso cristiano chino, el cual ha sido incluido en la lista de xie jiao en el año 1995. Las autoridades chinas consideran a los creyentes de la IDT criminales serios y los persiguen de manera despiadada.
Zheng Min (seudónimo), una miembro de la IDT procedente de Chongqing, una ciudad importante situada en la zona suroccidental de China, ha experimentado esta brutalidad en carne propia.
El 3 de septiembre de 2018, cinco oficiales de policía irrumpieron en el hogar de la Sra. Zheng y lo allanaron sin presentar una orden judicial. Los mismos incautaron varios artículos, entre los que se incluían una computadora portátil y dos reproductores MP5, la arrestaron y la llevaron a un «centro de educación legal» para someterla a adoctrinamiento obligatorio.
Mientras se encontraba detenida, la policía obligó a la Sra. Zheng a ver un video del asesinato en el McDonald’s del año 2014, además de otros videos que denigraban a la Iglesia de Dios Todopoderoso. Los oficiales de policía la interrogaron para saber quién era el líder de la Iglesia, si ella manejaba sus finanzas, y otra información administrativa relacionada con la misma. Al comprobar que el interrogatorio no arrojaba resultados útiles, la abofetearon y le propinaron una patada en las piernas. El rostro de la Sra. Zheng se inflamó y comenzó a sangrar, provocándole dificultades al abrir la boca para comer.
«Tu rostro es bastante duro», le dijo un oficial de policía con malicia. «Ni siquiera te arranqué los dientes. Si hubiera golpeado a otra persona, le hubiera arrancado los dientes inmediatamente».
Luego, el policía esposó las manos de la Sra. Zheng detrás de su espalda y le ordenó que permaneciera en cuclillas durante dos horas. Si bajaba la cabeza, la golpearía en la frente. Sus pies se entumecieron e hincharon, y comenzó a sudar profusamente.
«Esta es la tierra del Partido Comunista», gritaba el oficial de policía mientras atormentaba a la Sra. Zheng. «El Partido Comunista no te permite creer en Dios. Creer en Dios es ilegal”. Al ver que todavía no estaba dispuesta a confesar, el policía la amenazó diciendo: «Si no dices la verdad, te mataré». Acto seguido, volvió a abofetearla.
Para obligar a la Sra. Zheng a proporcionar información sobre la Iglesia, la policía la llevó afuera y la forzó a identificar los hogares de otros creyentes que ella conocía. El espectáculo ofrecido por la policía escoltándola por las calles atrajo a multitudes de espectadores. Cuando se negó a señalar las casas, los oficiales colocaron sus manos detrás de su espalda, sujetaron su cabeza y la golpearon en la calle mientras la sostenían fuertemente contra el suelo.
El 5 de septiembre, la Sra. Zheng fue liberada. Posteriormente, se dirigió a la casa de sus parientes para poder esconderse. Personal gubernamental la llamaba repetidamente o se dirigía a la vivienda para acosar a su familia, exigiendo que se presentara en una oficina gubernamental para firmar declaraciones de renuncia a su fe. Bajo esta presión, su esposo sintió que tenía que buscar trabajo en otra ciudad. La Sra. Zheng sigue temiendo ser arrestada nuevamente y no se atreve a regresar a su hogar.
Antes de este incidente, la Sra. Zheng había sido arrestada en tres ocasiones por creer en Dios.
Según el último informe presentado por la Iglesia de Dios Todopoderoso, en el año 2018, al menos 11 111 miembros de la Iglesia fueron arrestados, 685 personas fueron sometidas a diversas formas de tortura o adoctrinamiento obligatorio y al menos 20 personas fueron perseguidas hasta la muerte.
Informado por Yu Shi