Nueve organizaciones no gubernamentales apelan al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para que intervenga en el caso de Demei Zou, una solicitante de asilo de un nuevo movimiento religioso cristiano de China, la Iglesia de Dios Todopoderoso, quien fue detenida en Detroit, Michigan, y que se enfrenta a la deportación a China.
Estimado presidente Trump:
Somos varias ONG, algunas de ellas con estatus consultivo ECOSOC, activas en la defensa de los derechos humanos y la libertad religiosa con una experiencia y preocupación particular por China. Le escribimos para pedir su intervención urgente en una cuestión, literalmente, de vida o muerte.
Tiene que ver con una solicitante de asilo, que pertenece a un nuevo movimiento religioso cristiano en China, la Iglesia de Dios Todopoderoso, que está detenida en Detroit, Michigan, y que corre el riesgo de ser deportada inmediatamente a China, donde será arrestada y estará en serio peligro de ser ejecutada.
La Iglesia de Dios Todopoderoso es un grupo clasificado como xie jiao (“enseñanza heterodoxa”, a menudo mal traducido como “culto maligno”) y prohibido en China. Ser miembro activo de ella es un crimen según el artículo 300 del Código Criminal chino, con penas de tres a siete años “o más”; sin embargo, ser un líder de la misma puede conllevar un castigo mucho más severo. El gobierno chino ha difundido durante muchos años noticias falsas sobre la Iglesia de Dios Todopoderoso, acusándola de crímenes que nunca ha cometido.
La Sra. Demei Zou nació el 14 de agosto de 1976. Fue la líder de la Iglesia de Dios Todopoderoso en cuatro provincias de China. A causa de la fuerte persecución, alguien con un puesto como el de la Sra. Zou normalmente destruye todos sus documentos de identificación y trabaja utilizando varios alias. Su labor, sin embargo, fue descubierta por la policía. Su Iglesia obtuvo ilegalmente una copia de su “Registro de fugitiva”, un documento que estudiosos de prestigio consideran auténtico. En él se acusa a la Sra. Zou de ser, de hecho, la líder de la Iglesia de Dios Todopoderoso en las provincias de Yunnan, Guizhou, Chongqing y Sichuan. También acusa a la Sra. Zou de estar involucrada en “robar y llevar secretos militares chinos al extranjero”, una acusación absurda para aquellos que conocen su Iglesia, pero que implica la pena de muerte.
La Sra. Zou huyó de China a Corea del Sur usando el pasaporte de otra persona con su fotografía pegada en él. De Corea del Sur viajó a Estados Unidos y llegó a Detroit, Michigan, el 24 de enero de 2017. Ahí se descubrió que su pasaporte era falso y fue arrestada. Tuvo su primera audiencia el 11 de abril de 2017 y otra el 24 de abril de 2017. La Corte escuchó los testimonios de la Sra. Zou y de otros tres testigos —dos son miembros de la Iglesia a los que se les ha concedido ya asilo en los Estados Unidos a causa de la persecución religiosa— en sus audiencias individuales de méritos celebradas los días 13 de junio, 18 de julio y 29 de agosto de 2017. Recibió la notificación de haber perdido el caso en diciembre del mismo año. Llevó su caso a la Junta de Apelaciones de Inmigración (BIA, por sus siglas en inglés), pero una vez más la BIA confirmó la decisión adversa del Juez de Inmigración, la cual ella apeló el 15 de junio de 2018. Pero, de acuerdo con la relación que proporcionó a sus compañeros de religión, los oficiales de inmigración le advirtieron que sería deportada a China y de hecho trataron de hacerla subir a un avión con destino a Pekín la semana pasada, pero ella se resistió físicamente.
La Sra. Zou no habla inglés. Aunque la Corte de Inmigración de Detroit también hizo alusión a las noticias falsas sobre la Iglesia de Dios Todopoderoso que encontraron en internet (aunque han desaparecido incluso de Wikipedia y decisiones legales en otros países en casos paralelos de refugiados las presentan como mera propaganda china), los principales problemas fueron las dificultades de la Sra. Zou para probar su identidad, la destrucción de sus documentos de identidad y contar su historia de una forma comprensible para las autoridades, a pesar de que sus compañeros de religión atestiguaron conocerla a ella y su papel en la Iglesia. Entendemos que las cortes de Estados Unidos sostienen que no pueden estar seguras de que la mujer encarcelada en Detroit de verdad es la Sra. Zou, dado que no cuenta con documentos de identidad. Pero varios de sus compañeros de religión que han escapado a los Estados Unidos están dispuestos a declarar bajo juramento que ella es realmente la Sra. Zou.
Confiamos en que la apelación aclarará los malentendidos, se tomará en cuenta la amplia documentación sobre la Iglesia de Dios Todopoderoso y la persecución que sufre (justificada por estudios académicos serios) y que se permitirá testificar a reconocidos estudiosos conocedores del tema. Mientras tanto, la deportación de la Sra. Zou debe ser suspendida. Hay casos documentados de miembros de la Iglesia de Dios Todopoderoso que volvieron a China provenientes de países extranjeros y que fueron arrestados e incluso torturados o “desaparecidos”. Para la Sra. Zou, que ya ha sido acusada de espionaje e identificada como un importante líder de la Iglesia, el riesgo de la pena de muerte es muy alto.
Es inconcebible que los Estados Unidos, un país cuyo compromiso con los derechos humanos y la libertad religiosa es bien conocido y ha sido solemnemente confirmado durante su presidencia, vaya a entregar a la Sra. Zou a los perseguidores de su Iglesia y al verdugo, y se requiere una acción inmediata para evitar semejante tragedia.
4 de julio de 2018
Atentamente,
CAP-LC Coordination des Associations et des Particuliers pour la Liberté de Conscience
CESNUR – Center for Studies on New Religions
EIFRF European Inter-Religious Forum for Religious Freedom
FOB – European Federation for Freedom of Belief
FOREF – Forum for Religious Freedom Europe
HRWF – Human Rights Without Frontiers
LIREC – Center for Studies on Freedom of Belief, Religion and Conscience
ORLIR – International Observatory of Religious Liberty of Refugees
Soteria International