Revista sobre \n la libertad religiosa y \n los derechos humanos en China
La policía interrogó en repetidas ocasiones a una pareja de adultos mayores de la Iglesia de Dios Todopoderoso, arrestando a once miembros de la misma Iglesia en la ciudad de Chongqing.
En Sinkiang, se ha investigado y sancionado a alumnos y profesores por posesión de textos islámicos o cristianos, o por no haber informado de las creencias religiosas de los miembros de su familia.
Ni siquiera las iglesias de las Tres Autonomías controladas por el Gobierno están a salvo de la campaña de demoliciones: la iglesia de Baofeng, en Jiangxi, fue falsamente declarada insegura y demolida.
Al menos 32 miembros de la Iglesia de Dios Todopoderoso han sido detenidos y torturados en los alrededores de Xuzhou, Jiangsu, lugar en el que la policía intenta capturar a los líderes locales del movimiento.
En Sinkiang continúa habiendo una campaña masiva contra el islam. Se han demolido las mezquitas que los musulmanes de la zona han construido con años de esfuerzo y se ha arrestado tanto a los imanes como a los manifestantes.
Arrestada y torturada en repetidas ocasiones, la anciana de 71 años y líder de una iglesia doméstica, sigue siendo hostigada por la policía.
El 1 de junio de 2018, la policía realizó un registro en un lugar de reunión de la Iglesia de Dios Todopoderoso en el distrito de Yongchuan, municipio de Chongqing, y arrestó a cuatro creyentes.
En 2016, murió un obispo muy conocido de la Iglesia católica clandestina. Ahora surgen dudas acerca de las verdaderas causas de su muerte.
En las primeras horas de la mañana del 9 de junio de 2017, las cruces de dos templos de la Iglesia de las Tres Autonomías —Templo Huyuan y Templo Yaokou— fueron derribadas en secreto por el Partido Comunista de China (PCCh).
Perseguida por las autoridades, una mujer de 65 años miembro de la Iglesia de Dios Todopoderoso, es obligada a huir; su familia se encuentra bajo estricta vigilancia policial.
El predicador Shi Yuliang de la provincia de Zhejiang lleva huyendo más de diez años, no puede regresar a su hogar y su familia es hostigada constantemente por la policía.
Autoridades del gobierno local y agentes del orden público, han allanado muchos centros religiosos y detenido a creyentes en los condados de Dahua y Donglan, de la ciudad de Hechi, en los últimos meses.
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