Un residente de Anhui fue acosado por agentes de policía y su casa fue posteriormente destruida debido a que había organizado una reunión religiosa.
por Jiang Tao
En agosto de 2015, casi 500 creyentes de la Iglesia Apostólica estaban reuniéndose en la casa de Cheng Deyi (seudónimo) en la ciudad de Tongcheng, en Anhui. Fue la primera vez que el hombre, de unos 70 años, había recibido a creyentes en su casa, pero, aun así, alguien logró reportar la reunión a la policía de forma anónima.
El Gobierno local movilizó a más de 60 oficiales de policía plenamente armados y se presentaron en la casa del señor Cheng. De inmediato fue llevado a la estación de policía, donde fue forzado a elegir entre su casa y su pensión alimenticia. Ya que su hijo había fallecido años atrás y no podía trabajar, el señor Cheng terminó escogiendo lo último.
Eso significaba que su casa sería demolida. La policía envió una excavadora para realizar el trabajo. No obstante, cuatro creyentes de la tercera edad se interpusieron para detener la demolición pero fueron empujados por los policías. Uno de los creyentes, una mujer anciana, terminó con fracturas en la columna vertebral y tuvo que ser llevada a un hospital. Los otros tres fueron arrestados.
Después de esto, los oficiales rodearon el lugar de congregación. No permitían que nadie se acercara y alejaban a todos blandiendo bastones eléctricos. Muchos creyentes huyeron del lugar y una mujer se desmayó en el sitio.
La policía confiscó todas las pertenencias que se encontraban en la casa del señor Cheng. La construcción misma fue derribada poco tiempo después. No recibió ningún tipo de compensación por esto.
De acuerdo a la señora Dong (seudónimo), que era uno de los creyentes que estaban presentes en el sitio ese día, la Iglesia Apostólica admite a personas dos veces al año para el estudio bíblico. Sin embargo, debido a que la policía los acosa constantemente son forzados a reunirse en diferentes sitios cada vez. Se suponía que la reunión de estudio bíblico en la casa del señor Cheng duraría tres días.