Pazil Utuk, un creyente musulmán de etnia uigur procedente de una antigua y reconocida familia musulmana de Sinkiang, fue asesinado a tiros luego de una masiva persecución que movilizó a más de 70 000 personas.
Pazil Utuk, de treinta años y oriundo de la etnia uigur, provenía de una antigua y reconocida familia musulmana, lo que explica las extraordinarias medidas tomadas por las autoridades para detenerlo. Había pertenecido al Regimiento 64 en el condado de Huocheng, de la prefectura de Yili. Se estaba escondiendo, intentando escapar de la reclusión en campamento de «transformación por medio de educación», cuando las autoridades movilizaron a 70 000 personas en una cacería masiva destinada a encontrarlo. El 1 de abril de 2018, la policía finalmente encontró a Pazil Utuk, y lo asesinó a tiros.
En mayo de 2017, Pazil Utuk fue arrestado por funcionarios del gobierno local durante un servicio religioso por «participar en actividades religiosas ilegales», y fue liberado en agosto. Las autoridades locales continuaron vigilándolo ya que lo consideraban un «objetivo clave en el control del islam radical», y su nombre fue puesto en una lista de personas a las que el gobierno rastrea continuamente, poniéndolo en peligro de ser arrestado en cualquier momento. Los días 16 y 17 de marzo de 2018, funcionarios locales le notificaron en dos ocasiones a Pazil Utuk que debía reportarse en un «campamento de transformación por medio de educación». Para evadir el adoctrinamiento forzoso, le pidió prestado a su hermana mayor 700 yuanes, salió de su casa emplazada en el 64º Regimiento, a pie, y caminó hasta el vecino Regimiento 63° para poder esconderse.
El 18 de marzo, Pazil Utuk decidió que era más seguro esconderse en una pequeña isla, y le pidió a un pastor kazajo que le prestara un caballo para cruzar el río. Acordó devolver el caballo después de llegar a la isla. Preocupado porque su caballo podría ser robado, el pastor decidió consultar a su familia y amigos, y les envió mensajes de texto a través de la red social china WeChat. Gracias a los mensajes, los líderes del regimiento, la policía y otros funcionarios se enteraron del paradero de Pazil Utuk, y se apresuraron a movilizar gente para poder arrestarlo.
La policía encontró a Pazil Utuk en la isla e inmediatamente abrió fuego. Para escapar del arresto, se cortó la garganta con un cuchillo, prefiriendo el suicidio a la detención en el temido campamento. No obstante, fue capturado vivo y enviado al hospital del 66° Regimiento para recibir tratamiento. Mientras estuvo internado, agentes de la policía lo vigilaron por turnos, día y noche. Poco a poco, recuperó sus fuerzas. A las 5:24 de la mañana del 27 de marzo, Pazil Utuk notó que el oficial de policía que lo estaba vigilando se había quedado dormido, y escapó del hospital escalando el muro.
El secretario del Partido Urumqi, Chen Quanguo, emitió una orden para capturar a Pazil Utuk vivo o muerto. El Departamento de Seguridad Pública del condado de Huocheng emitió una orden de arresto por el delito de «robo de caballo». El gobierno local movilizó a más de 70 000 personas de siete diferentes regimientos para contener a toda la ciudad y encontrarlo, una movilización extraña teniendo en cuenta que el crimen de Pazil sólo era por un simple «robo de caballo». Aún más desproporcionado para un caso de «robo de caballo» fue que se ordenó el cierre de escuelas y hospitales en el área, se cerraron fábricas, y se detuvo la agricultura de primavera. La policía colocó centinelas en cada intersección, avenida y callejón, y ordenó a los empleados de los siete regimientos que trabajaran doble turno para buscar en cada centímetro de la zona, de manera exhaustiva, durante el día y la noche.
El 1 de abril, Pazil Utuk fue encontrado en una alcantarilla en Liangfanchang, en la frontera del condado de Huocheng, debajo de un puente. Al llegar la policía, abrieron fuego, y lo asesinaron allí mismo.
Bitter Winter se enteró de que, desde que Pazil Utuk escapara por primera vez, el hostigamiento y los arrestos se extendieron a toda su familia. Después de que fuera asesinado a tiros, la policía detuvo a todos aquellos cuyos nombres se encontraron en la lista de contactos de su teléfono celular.
También nos enteramos de que el Partido Comunista de China no estaba contento por el tiempo que llevó hallar y asesinar a Pazil Utuk, por lo que aplicaron castigos. Treinta y dos personas en el Regimiento 64 fueron penalizadas en diversos grados, desde los cuadros principales hasta los líderes de la compañía. Los cuadros de la fuerza policial fueron despojados de sus puestos, y miembros del Partido, y los líderes del Regimiento Especial de la Policía fueron despedidos. El secretario del Comité Político y Legal, y el director del departamento también fueron despedidos. Todos recibieron castigos disciplinarios, y algunos incluso fueron detenidos.
Información de Li Zaili