Tras intentar detener a un creyente seis veces sin éxito, la policía publicó una alerta en Internet para capturarlo.
Liu Yan (pseudónimo), líder de una iglesia doméstica de la ciudad de Heze, provincia de Shandong, y creyente desde 1993, ha sido perseguido por la policía durante años.
La policía intentó detenerlo cuatro veces en 1997, pero no lo logró. En 2013, hubo dos intentos fallidos más.
Para evitar ser detenido, Liu Yan se vio obligado a huir y mantenerse en la clandestinidad. Su esposa se quedó sola y tuvo que criar así a sus tres hijos y velar por su suegra enferma. Liu Yan ni siquiera se atrevió a volver a casa para el funeral de su madre.
A finales de 2017, el secretario del comité del Partido Comunista del pueblo le dijo varias veces a la familia de Liu Yan que, como había estado huido durante tanto tiempo, no lo perseguirían más si regresaba y firmaba un documento en la comisaría. La familia llamó a Liu Yan e intentó convencerlo de que volviera a casa, pero no lo logró. Temía que su teléfono estuviese intervenido y dejó de comunicarse con su familia. A principios de 2018, el PCCh emitió una orden de arresto contra Liu Yan por Internet y ahora corre aún más peligro.
Informado por Jiang Tao