La policía presiona a los familiares de miembros de la Iglesia de Dios Todopoderoso que han huido de China para que logren que los creyentes regresen al país, donde se enfrentan a ser detenidos.
Muchos cristianos de China Continental han huido al extranjero para buscar asilo debido a la persecución y represión de creyentes religiosos llevada a cabo por las autoridades del Partido Comunista Chino (PCCh). Muchos de estos cristianos exiliados han descubierto, no obstante, que la persecución no finaliza cuando salen del país, sino que simplemente es transferida a sus familiares.
Bitter Winter informó anteriormente que en las provincias de Hebei y Hunan y en otros sitios, familiares de varios miembros de la Iglesia de Dios Todopoderoso (IDT) que habían huido a Corea del Sur han sido intimidados por las autoridades. Se les ha pedido que cooperen con la filmación del video del PCCh titulado «Buscando a familiares». Las autoridades esperan utilizar el video para obligar a los cristianos que solicitan asilo político en Corea del Sur a regresar a China.
Las historias personales de familias individuales ayudan a aclarar los dilemas que enfrentan los creyentes y sus familiares.
Liu Shuang, una miembro de la IDT de 35 años, huyó de China. Este octubre, cuatro o cinco oficiales de policía en la provincia de Heilongjiang, se presentaron en el hogar de su madre bajo el pretexto de estar realizando un censo de hogares. No obstante, los oficiales no realizaron una encuesta sobre hogares tradicional, sino que en lugar de ello, le realizaron numerosas preguntas sobre los viajes de Liu Shuang al extranjero. Además, los funcionarios también encontraron al esposo de la Sra. Liu y lo presionaron para que les informara sobre el estado religioso de la misma.
Las fuentes informan que, ya desde el año 2015, el PCCh emitió un documento secreto en el que exigía explícitamente que los funcionarios de toda China investigaran a los miembros de la IDT que habían abandonado el país. Un infiltrado dentro del PCCh reveló que Meng Jianzhu, secretario de la Comisión Central de Asuntos Políticos y Legales, les ordenó a sus funcionarios «establecer una gran base de datos de organizaciones religiosas y personas en el extranjero, para que podamos poner en marcha y regular ataques con precisión».
La naturaleza de los ataques ordenados por el Sr. Meng puede ser vista en ejemplos tales como el de Xiao Wanjun, una cristiana procedente de Qiqihar, en la provincia de Heilongjiang.
Este agosto, funcionarios del Gobierno local llamaron al padre de Xiao Wanjun y le dijeron: «Su hija está difundiendo el Evangelio en el extranjero. Ya está siendo vigilada por el Ministerio de Seguridad de Estado. Queremos que vuelva ahora. Debido a que son sus padres, tanto usted como su esposa deben garantizar que ella ya no cree en Dios».
Desde esta llamada telefónica, la madre de la Sra. Xiao se ha sentido sumamente ansiosa, temiendo ser perseguida en un futuro cercano. La misma sabe que si su hija regresara a China, probablemente sería arrestada y sentenciada como muchos otros cristianos. De varios de los que han sido encarcelados no se sabe nada desde el momento de su detención. La madre de Xiao afirmó preocupada: «¡Me temo que si la obligan a regresar, la torturarán y la golpearán hasta casi matarla!».
La familia de Cheng Yikun, una cristiana procedente de otra ciudad de la provincia de Heilongjiang, fue presionada de manera similar. Este agosto, dos miembros del personal de la Asociación Religiosa Municipal se reunieron con la hermana mayor de la Sra. Cheng para investigar las creencias religiosas de su hermana exiliada. La misma fue amenazada y le dijeron: “Tu hermana cree en Dios Todopoderoso. El país se opone y prohíbe las creencias religiosas. Actualmente, ella está practicando su fe en el extranjero. ¡Debes cooperar con nosotros para que regrese!». Pero, la hermana de Cheng Yikun se negó a hacerlo.
Las historias de familias temerosas e intimidadas abundan por toda China. Por ejemplo, en la provincia de Anhui, situada al este de China, numerosas familias denuncian haber sido acosadas luego de que sus familiares cristianos escaparan al extranjero. Li Hui, Wang Ming y Zhang Yingying son todos miembros de la IDT que huyeron para evitar ser arrestados por la policía del PCCh. Desde el mes de julio, sus familiares han sido visitados por la policía en sus hogares para ser interrogados y acosados. La policía amenazó e intimidó a los familiares de cristianos que se encuentran viviendo en el extranjero para poder obtener información detallada sobre los mismos, provocando que sus familias vivan con miedo.
(Todos los nombres son pseudónimos)
Información de Piao Junying