En Mongolia Interior, a los que quieren denunciar a los movimientos religiosos prohibidos a cambio de una recompensa se les dice cómo deben capacitarse y adquirir más habilidades.
por Massimo Introvigne
Todo trabajo requiere una formación. Si deseas ser médico o abogado, debes recibir la educación y la formación adecuadas. Incluso si quieres ser un ladrón, debes aprender el oficio de ladrones más experimentados que tú. Ser informante de la policía en China tal vez no sea un trabajo muy honorable, pero también requiere algunas habilidades.
En Mongolia Interior, el Partido Comunista Chino (PCCh) tiene buenas razones para estar nervioso por los disturbios —los cuales fueron generados por el Partido mismo tras decidir promover un genocidio cultural contra el idioma y la cultura mongoles—. El PCCh también ha decidido culpar de los disturbios a los xie jiao, un término traducido por el propio PCCh como «sectas malvadas», pero que en realidad significa «enseñanzas heterodoxas». El PCCh identifica a los grupos religiosos que han crecido rápidamente pero que permanecen fuera de su control y los prohíbe tras catalogarlos como xie jiao. Participar activamente en estos grupos religiosos es considerado un delito. Sus miembros son condenados a entre tres y siete años de prisión o incluso a penas más severas de acuerdo con el artículo 300 del Código Penal Chino.
Para arrestar a los miembros de un xie jiao, el PCCh depende en gran medida de los informantes. Los mismos son recompensados con premios en efectivo. Pero no son muy hábiles o el PCCh no está totalmente satisfecho con su labor; razón por la cual decidió que necesitaba mejores informantes y publicó en Mongolia Interior lo que podemos llamar un «Manual del informante». Este manual fue lanzado en el distrito de Dongsheng de la ciudad a nivel de prefectura de Ordos, pero está siendo anunciado en todo el país.
El título oficial del «manual» es «Anuncio sobre la recompensa por denunciar las actividades ilegales y delictivas de un xie jiao por parte de residentes del distrito de Dongsheng de la ciudad de Ordos, en Mongolia interior». El texto les recuerda a los ciudadanos que denunciar un xie jiao es un buen negocio. «Una vez verificadas las pistas, las mismas se clasificarán de acuerdo con su importancia y el papel desempeñado en la investigación del caso. Si se procesa un caso administrativo de seguridad pública basándose en las pistas, el informante será recompensado con 500 yuanes por cada caso. Si se procesa un caso criminal basándose en las pistas, al informante se le entregará una recompensa de 2000 yuanes. Si se procesa un caso criminal importante basándose en las pistas, el informante recibirá una recompensa de 10 000 yuanes».
¿Cómo reconocerá el informante a un xie jiao? El manual utiliza la retórica antisectaria estándar, proclamando que «un xie jiao lleva a cabo actividades ilegales bajo la bandera de la religión», «un xie jiao organiza actividades a hurtadillas», «un xie jiao promociona a sus líderes como si fueran el ‘dios’ supremo». Según estos estándares, todas las religiones podrían ser identificadas como un xie jiao si el PCCh así lo decidiera. El cristianismo en general considera a Jesús como Dios. Las iglesias domésticas protestantes y los objetores de conciencia católicos que se niegan a unirse a la Asociación Patriótica Católica China también técnicamente “llevan a cabo actividades ilegales” en China. Los devotos de las religiones «ilegales» se ven obligados a reunirse en secreto debido a la persecución del PCCh. Los mismos se sentirían felices de que se les permitiera practicar sus religiones de manera libre y abierta. Y, obviamente, el propio PCCh, aunque no utiliza la palabra «dios», ha efectuado extravagantes afirmaciones y ha promovido el culto a la personalidad de sus líderes, desde el presidente Mao hasta Xi Jinping. Las estatuas de los líderes del PCCh incluso han sido consagradas en templos. Al aplicar sus propios estándares, no sería difícil argumentar que el propio PCCh es un xie jiao.
Para evitar que sus lectores determinen por sí mismos qué organización es un xie jiao, el manual explica que el PCCh está mayormente interesado en combatir tres grupos: Falun Gong, la Iglesia de Dios Todopoderoso y la Asociación de Discípulos.
El manual luego procede a capacitar a los que aspiran a convertirse en informantes (y a embolsarse las recompensas) para detectar si sus vecinos pueden ser miembros de la Asociación de Discípulos. En primer lugar, deben “verificar si alguien cree en la tercera redención de Cristo. En segundo lugar, deben comprobar si en el hogar hay una cruz roja (la bandera de Desheng). En tercer lugar, deben comprobar si, cuando están enfermos, oran pidiendo curación. En cuarto lugar, deben verificar si han bendecido algún tipo de grano o arroz. En quinto lugar, deben verificar si van a predicar el Evangelio ‘bajo la apariencia del cristianismo’. En sexto lugar, deben comprobar si oran arrodillados». Por supuesto, algunas de estas características son comunes a otros grupos cristianos además de a la Asociación de Discípulos.
El manual puede ser menos útil para Falun Gong, ya que los informantes reciben instrucciones de buscar «un uso fraudulento del nombre de la religión y el término qigong«, la adoración de un líder, «lavado de cerebro», solicitudes de dinero y «daños a la sociedad». Así es como la propaganda antisectaria describe a las “sectas” en general, y las sugerencias no son particularmente útiles para identificar si un vecino es practicante de Falun Gong. Nuevamente, «adorar a un líder», «pedir dinero» en forma de sobornos, ejercer presión psicológica y practicar el adoctrinamiento, y “dañar a la sociedad” son características más obvias del PCCh que de cualquier grupo religioso activo en China.
El manual comienza en la misma línea en lo referente a la Iglesia de Dios Todopoderoso, afirmando que la misma “utiliza de manera fraudulenta las doctrinas cristianas”, lo cual una vez más constituye propaganda estándar, no especialmente útil para los informantes. También es extraño que un partido ateo como el PCCh afirme ser competente para decidir qué doctrinas cristianas son «genuinas» y cuáles son «fraudulentas». La Iglesia de Dios Todopoderoso posee su propia interpretación peculiar del cristianismo, pero la mayoría de los que la han analizado, en palabras de la académica estadounidense Holly Folk, «apoyan la conclusión de que la IDT es de hecho ‘cristiana’«.
Los informantes reciben consejos más prácticos cuando se les dice que “busquen el logotipo. El símbolo de ‘la Iglesia de Dios Todopoderoso’ es un patrón compuesto por una cruz, una luna creciente y una estrella». También es útil la sugerencia de buscar los títulos de los libros publicados por la Iglesia de Dios Todopoderoso, incluidas sus escrituras: La Palabra manifestada en carne, y algunas expresiones comúnmente utilizadas por los devotos, tales como «cumplir con el deber», “gran dragón rojo” y otras. El manual también explica que las reuniones de la Iglesia de Dios Todopoderoso se organizan en hogares privados y que los miembros utilizan seudónimos o nombres religiosos. Estas características no son exclusivas de la Iglesia de Dios Todopoderoso.
En general, este es un negocio sórdido, en donde se capacita a los informantes para efectuar denuncias, por dinero, contra personas que pueden ser sus vecinos o amigos, los cuales serán arrestados, detenidos y torturados. El manual muestra que el PCCh lleva a cabo este negocio abiertamente y de manera desvergonzada.