El embajador Brownback y testigos denuncian la represión china a la libertad religiosa en la Reunión para el Avance de la Libertad Religiosa en Washington, D.C.
En la Reunión para el Avance de la Libertad Religiosa, una reunión para ministros de relaciones exteriores de 80 países organizada por el Departamento de Estado de los Estados Unidos en Washington, D.C., la primera reunión plenaria el 24 de junio comenzó con una enérgica condena contra China por parte del embajador extraordinario de los Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional, Sam Brownback, quien denunció la “impactante situación” que emerge de los testimonios sobre los campos de “transformación por la educación”, los cuales en estos momentos alojan a más de un millón de ciudadanos chinos encarcelados a causa de su fe.
La esposa del pastor John Cao, líder de una iglesia doméstica sentenciado a siete años con base en falsos cargos de tráfico humano, y representantes de la comunidad musulmana uigur, compartieron su convicción de que el Partido Comunista Chino ha lanzado una generalizada represión religiosa, cuyo último objetivo es erradicar cualquier presencia religiosa que no esté bajo el estricto control de las autoridades. Los uigures, en particular, son “tratados como animales” en los campos de “transformación por la educación”, dentro de una “brutal represión” de la religión.
El editor en jefe de Bitter Winter, Massimo Introvigne, y la editora adjunta, Rosita Šorytė, están entre los 300 expertos que participan en la Reunión. Bitter Winter organizó el primer evento alterno de la Reunión el 22 de julio.
