El concepto de «culpa por asociación» fue ampliamente utilizado por las antiguas clases dominantes chinas contra criminales peligrosos; el PCCh actualmente aplica esta regla para perseguir a las religiones.
En junio de 2017, una cristiana de la ciudad de Nanping en Fujian se vio obligada a huir de su hogar para evitar ser arrestada. Cuando su hija solicitó un puesto en la policía auxiliar local, el gobierno rechazó su solicitud alegando que «su madre cree en Dios y, por lo tanto, es una delincuente».
El 1 de agosto de 2018, el ex marido de dicha cristiana, del que se divorció hace más de diez años, fue investigado por la policía y luego despedido de su trabajo debido a la creencia en Dios de su exesposa. Las autoridades le prohibieron divulgar los motivos de su despido.
Para obligar a los creyentes a renunciar a sus creencias religiosas, el PCCh incluso persigue a sus parientes lejanos. Según el esposo de una creyente en Dios Todopoderoso de la ciudad de Xinmi en Henán, su sobrino no pudo unirse al ejército debido a la creencia de su tía en Dios Todopoderoso, a pesar de que cumple con todos los requisitos necesarios para ser soldado.
Los familiares de los creyentes, e incluso sus parientes lejanos pueden sufrir persecuciones durante años. Un miembro de una iglesia doméstica emplazada en la ciudad de Jiujiang en Jiangxi, Yang Hulin, fue perseguido por creer en Dios y huyó en el año1996. Hasta la fecha, Yang Hulin no ha podido regresar a su hogar. En marzo de 2018, su hijo solicitó asistencia social con el gobierno local y su solicitud fue rechazada debido a que la policía local había descubierto que su padre era cristiano.
El yerno de un miembro de la Iglesia de Dios Todopoderoso de la ciudad de Changsha en Hunn descubrió accidentalmente que había sido incluido en la lista negra del gobierno y que va a ser vigilado debido a la afiliación religiosa de su suegro.
Según se informa, el PCCh está poniendo en marcha un programa integral para registrar a miembros de diversos movimientos religiosos y denominaciones en todo el país. Preocupado por esta iniciativa, el pastor de una iglesia protestante de las Tres Autonomías controlada por el gobierno, dijo: «Una vez que se ha registrado la información personal de un creyente, es fácil para el gobierno vigilarlo y capturarlo. Además, sus familiares y otros parientes podrían ser implicados, lo que afectará sus estudios y carreras. El gobierno está usando esto para intimidar a los creyentes y obligarlos a renunciar a sus creencias».
Informado por Lin Yijiang