Un miembro de una Iglesia de Henán ha sido sentenciado por su fe en tres ocasiones, lo que le ocasionó incapacidad mental y física.
Zhang Wei (seudónimo), un fiel de 55 años de una Iglesia doméstica local del poblado de Gaoxin, en el distrito Suiyang de la ciudad de Shangqiu, en Henán, fue detenido en tres ocasiones por la policía del Partido Comunista de China (PCCh) y enviado a prisión cada vez por creer en Dios. Como resultado de la persecución, Zhang Wei padece problemas mentales y ya no puede cuidar de sí mismo. Hasta la fecha, la policía continúa acosándolo a él y a su familia.
A las nueve de la mañana del 17 de mayo de 2017, Zhang Wei asistía a una reunión de la Iglesia en el poblado de Guocun del distrito de Suiyang, cuando varias docenas de agentes armados de la Brigada de Seguridad Nacional del Departamento de Seguridad Pública de Suiyang irrumpieron en el lugar. Citando acusaciones de reunión ilegal, los oficiales arrestaron a 80 miembros de la Iglesia, incluyendo a Zhang Wei, y los llevaron a la estación de policía de Xincheng. Los detenidos fueron transferidos más tarde al centro de detención Pingtai, en la ciudad de Shangqiu.
Luego de múltiples interrogatorios, en abril de 2018, el tribunal acusó a Zhang Wei de «reunión ilegal y creencia en xie jiao» (organización heterodoxa) y lo condenó a cinco años de prisión. Éste fue el tercer arresto de Zhang Wei; anteriormente fue arrestado por su fe en noviembre de 2001 y sentenciado a dos años de cárcel, y a principios de abril de 2009 fue sentenciado a cuatro años.
A principios de abril de 2018, Zhang Wei fue trasladado a la prisión de Kaifeng para cumplir su condena. El 25 de abril, la policía llamó a su familia informándoles que Zhang Wei se había enfermado gravemente en prisión, y solicitó que la familia se presentara para su liberación dentro de una semana, de lo contrario, su destino quedaría bajo su responsabilidad.
La familia de Zhang Wei se dirigió velozmente hacia Kaifeng y se les dijo que fueran al Primer Hospital Afiliado de la Universidad de Henán, donde había sido trasladado. Se encontraba en coma, yaciendo como muerto: en menos de un mes, un individuo que se encontraba en perfecto estado de salud fue conducido a este estado. La familia no se atrevió a presentar cargos, por lo que simplemente pagaron su fianza y su tratamiento. El 1 de mayo, Zhang Wei fue trasladado al Cuarto Hospital de Shangqiu para recibir tratamiento y fue liberado después de un mes, el 30 de mayo.
Según fuentes, los movimientos de Zhang Wei son todavía lentos y su expresión facial no tiene vida, él nunca habla, ha perdido la memoria y ya no puede cuidar de sí mismo. Aun así, la policía del PCCh continúa vigilando y hostigando a Zhang Wei. El 7 de junio, dos personas que afirmaban pertenecer al departamento judicial fueron a tomar fotos de Zhang Wei, afirmando que tenían que informar sobre su estado a sus superiores.
La hija y el hijo de Zhang Wei ahora lo están cuidando, ya que su esposa, que también es miembro de una Iglesia doméstica, está siendo perseguida por la policía por creer en Dios, y actualmente se encuentra prófuga. Los agentes amenazaron a su hijo con arrestar a su madre inmediatamente si regresaba.
Informado por Jiang Tao
