Tres iglesias protestantes aprobadas por el Gobierno han sido destruidas en la ciudad de Linyi en la provincia de Shandong por diversas razones inventadas.
por Li Mingxuan
A principios de mayo, un equipo de inspección de la Administración Estatal de Asuntos Religiosos visitó la provincia oriental de Shandong para investigar el estado de los asuntos religiosos. En preparación para la visita de los altos mandos de Pekín, los Gobiernos locales habían estado llevando a cabo investigaciones e implementando campañas represivas en sus jurisdicciones. Tres iglesias de las Tres Autonomías fueron demolidas en Linyi, una ciudad en sur de la provincia.
Destruida por ser «demasiado lujosa»
La iglesia de Mazhuang emplazada en el condado de Lanling no tuvo la oportunidad de cumplir su propósito –aún estaba siendo construida cuando las autoridades la hicieron estallar el 3 de mayo.
Según miembros de la congregación, la construcción de la iglesia había comenzado en abril de 2017 a un costo de más de 1,5 millones de yuanes (aproximadamente 230 000 dólares) –dinero donado por sus miembros. El director de la iglesia solicitó todos los permisos necesarios, pero nunca los recibió. Esto sirvió como pretexto para que el Gobierno local destruyera la iglesia al declararla ilegal.
La cruz de la iglesia ya había sido desmantelada en el mes de marzo. El 3 de mayo, un grupo de funcionarios se presentó en la iglesia para supervisar su demolición. La policía acordonó todas las intersecciones circundantes, prohibiendo que los transeúntes se acercaran al lugar y tomaran fotos. El equipo de demolición contratado por el Gobierno primero utilizó explosivos para volar los pilares de la iglesia y luego la demolió. En solo tres días, la iglesia fue arrasada hasta los cimientos. Cinco vehículos se llevaron los escombros durante la noche.
La impresionante arquitectura de estilo occidental de la iglesia debe haber amenazado a las autoridades. Según funcionarios locales, la iglesia era «demasiado lujosa», más majestuosa que los edificios gubernamentales. «El Estado pone mucho empeño en recaudar fondos. ¿Cómo pueden estar tan unidos los que creen en Dios en sus esfuerzos por construir la iglesia?”, afirmó sorprendido un funcionario gubernamental.
Funcionarios del condado y del poblado se mostraban reacios a demolerla: los mismos querían conservar el edificio y reutilizarlo como apartamentos para ancianos o como un club cultural. No obstante, el Gobierno provincial ordenó que la iglesia fuera demolida, un acto inútil que costó aproximadamente 100 000 yuanes (aproximadamente 150 000 dólares).
Un miembro de la iglesia afirmó que antes de la demolición, funcionarios del Partido Comunista Chino (PCCh) amenazaron e intimidaron al pastor, ordenándole que obedeciera al Gobierno, o de lo contrario, sus calificaciones pastorales serían revocadas y su hijo sería destituido de su cargo en el Gobierno.
Solo queda un muro en pie
El 4 de mayo, una iglesia emplazada en el distrito de Lanshan, construida hace siete años, fue demolida porque «violaba leyes de construcción», afirmaron los funcionarios.
Ese día, más de 20 miembros del personal gubernamental irrumpieron en la iglesia. Cuando unos pocos creyentes ancianos se negaron a irse, agentes del departamento de administración urbana amenazaron con golpearlos si desobedecían. Unas horas más tarde, la iglesia fue demolida, y solo un muro quedó en pie.
Ya en el mes de marzo, las autoridades habían comenzado a presionar a la iglesia. Más tarde, ese mismo mes, su cruz fue removida y, en el mes de abril, el Gobierno local ordenó derribar toda la iglesia. La congregación no está de acuerdo con las afirmaciones del Gobierno de que la iglesia fue construida ilegalmente –los mismos afirmaron que los cimientos de la iglesia ya habían sido establecidos cuando fue comprada a un desarrollador de bienes raíces.
Ahuyentando al «Dios americano»
Una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en el distrito de Luozhuang aún estaba en proceso de reconstrucción cuando las autoridades locales comenzaron a hostigarla. La iglesia original había sido demolida hace un tiempo, por lo que fue reubicada en un nuevo lugar, donde un desarrollador comenzó a construir la iglesia en el mes de febrero. Ya se había fabricado una cruz de dos metros de altura para ser colocada en el techo de la misma.
No obstante, el 10 de marzo, funcionarios del Gobierno del poblado repentinamente pusieron fin a la construcción, alegando que el edificio de la iglesia era demasiado alto. En colaboración con la policía local, primero destruyeron la cruz que estaba lista para ser instalada, junto al bloque de hierro en el donde se suponía que se colocaría. A mediados de mayo, funcionarios ordenaron al desarrollador que suspendiera los trabajos de construcción, ahuyentaron al equipo de construcción y bloquearon la iglesia con una red. En la actualidad, el destino de la misma es incierto.
Las autoridades distritales inventaron razones aún más ridículas para destruir iglesias. Un predicador local le dijo a Bitter Winter que recientemente asistió a una reunión sobre religión durante la cual, para su sorpresa, funcionarios del Departamento de Trabajo del Frente Unido declararon que el Dios en el que el pueblo chino cree proviene de Estados Unidos. Dado que, actualmente, las relaciones entre China y Estados Unidos no son las mejores, si los dos países van a la guerra, con tanta gente creyendo en Jesús, podrían ir en contra de su Gobierno. Es por ello que la religión es perjudicial para el país, y el PCCh debe apresurarse a reprimirla.