El Partido Comunista Chino (PCCh) controla estrictamente a los pastores y predicadores designados por el Estado, así como también a los miembros de sus congregaciones, limitando la práctica de su fe a las áreas donde viven.
por An Xin
Bitter Winter ha obtenido un documento titulado “Solicitud de permiso de ausencia y sistema de informes para personas a cargo de lugares donde se llevan a cabo actividades religiosas”, emitido en el mes de abril por la Agencia de Asuntos Religiosos de una localidad en la provincia nororiental china de Liaoning. Similar a lo que ocurre con otras estrictas medidas de control de viajes del clero, según este nuevo decreto, las personas a cargo de lugares religiosos deben solicitar un permiso en la Agencia tres días antes de abandonar la ciudad. Sólo entonces podrán viajar, y deberán regresar dentro del plazo de tiempo especificado. Las personas que abandonan la zona sin permiso o que no regresan tal y como se les ha indicado, así como también aquellos cuyo paradero es desconocido sin explicación, serán amonestados y reprendidos públicamente, pudiendo enfrentar castigos aún más severos.
«En la actualidad, el Gobierno está ejerciendo un control sumamente riguroso. Teme que la gente predique en otra localidad», afirmó con preocupación el representante legal de una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en Liaoning. «Toda nuestra información personal ha sido registrada por las autoridades. En el futuro, me temo que incluso se nos impondrán restricciones para comprar boletos de tren, a menos que la compra sea aprobada por la Agencia de Asuntos Religiosos».
También se han adoptado medidas análogas en otras partes del país. En junio de 2018, la predicadora de una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la ciudad de Xuancheng, en la provincia oriental de Anhui, viajó a la provincia china central de Hubei, para asistir a una reunión. A su regreso, funcionarios de la Agencia de Asuntos Religiosos la interrogaron y reprendieron por haber salido del poblado sin permiso. Los funcionarios le dijeron que estaría bajo observación durante medio año, y si descubren que está «desobedeciendo al Gobierno», clausurarán la iglesia de las Tres Autonomías a la que pertenece.
Para evitar que los miembros del clero tengan contactos con religiosos extranjeros, funcionarios de la Agencia de Seguridad Pública de la ciudad de Tieling, en la provincia nororiental de Liaoning, le confiscaron el permiso de entrada y salida para viajar desde y hacia Hong Kong y Macao al presbítero de una iglesia. El incidente fue colocado en su registro oficial. “Todos los miembros del clero que viajan al extranjero cuentan con un permiso. Esto debe ser reportado a la Agencia de Seguridad Pública y hacer que conste en acta. Temiendo que nos volvamos a ir, nos vigilan y no nos dejan viajar libremente. En particular, no nos dejan viajar a Corea del Sur o a Estados Unidos, y se nos ha impuesto un estricto control».
Según informes procedentes de iglesias de las Tres Autonomías emplazadas en varias regiones, funcionarios gubernamentales inspeccionan con frecuencia sus lugares de culto para verificar si creyentes o predicadores de fuera del poblado asisten a sus reuniones.
El 4 de marzo, cuando miembros del personal de la Agencia de Asuntos Religiosos del condado de Jingde, en la ciudad de Xuancheng de Anhui, se presentaron en la iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la aldea de Wanli del municipio de Huatan para efectuar una inspección, descubrieron a cuatro presbíteros cristianos procedentes de un condado vecino. Los mismos reprendieron a los creyentes, quienes les explicaron que habían cruzado la frontera del condado sólo porque les gustaban los sermones impartidos en dicha iglesia. Los oficiales afirmaron que habían violado las regulaciones existentes y amenazaron con quemar la iglesia si regresaban.
En abril de 2018, una mujer, miembro de una iglesia de las Tres Autonomías, quien reside en la ciudad de Fuzhou de la provincia suroriental de Jiangxi, invitó a un predicador de fuera del poblado a su hogar para celebrar una reunión. La misma fue arrestada luego de que alguien alertara a la policía, quienes más tarde la interrogaron repetidamente sobre sus contactos con el predicador invitado. La policía también confiscó su pasaporte y su permiso de entrada y salida para viajar a Hong Kong y Macao.
El 11 de julio del año pasado, funcionarios de la Agencia de Asuntos Étnicos y Religiosos del condado de Xiping de la ciudad de Zhumadian, en la provincia central de Henán, acompañados por la policía, irrumpieron en una iglesia de las Tres Autonomías local. Al oír que el cristiano que estaba enseñando canciones tenía acento extranjero, le detuvieron y escoltaron hasta la estación de policía, y posteriormente le multaron con 1000 yuanes (aproximadamente 145 dólares). «No puedes irte, contactarte o reunirte con otras personas de manera arbitraria. Si descubrimos que lo vuelves a hacer, serás encarcelada», le advirtieron los oficiales de policía al cristiano.