Los dormitorios de los estudiantes son allanados en busca de artículos relacionados con la fe, cualquier libro sobre religión es prohibido en las bibliotecas y se investiga el estatus religioso de los maestros.
por Li Changshan
Los colegios y universidades son un territorio importante para que el Partido Comunista Chino (PCCh) promueva su ideología al instruir a los sucesores del socialismo chino ideológicamente adoctrinados. A medida que la campaña para boicotear las creencias religiosas se lleva a cabo por toda China, a los estudiantes y maestros se les prohíbe tener creencias religiosas, son investigados con el fin de asegurarse de que son ateos y se prohíbe que cualquier libro relacionado con la fe aparezca en los campus. Incluso una mención de la religión está causando miedo e histeria.
El Gobierno de una localidad en la provincia central de Henán emitió un documento confidencial acerca de la aplicación de medidas enérgicas sobre las creencias religiosas y pone énfasis en la necesidad de “fortalecer la educación que promueve el ateísmo y la visión marxista de la religión, además de fortalecer la gobernanza conjunta de las escuelas, las familias y la sociedad, oponiéndose a la infiltración religiosa e impidiendo la labor misionera en los campus”.
Un documento confidencial acerca de la aplicación de medidas enérgicas sobre las creencias religiosas, emitido por una localidad en Henán.
Los dormitorios son registrados en busca de artículos religiosos
Con el fin de investigar las creencias religiosas de los estudiantes, un colegio en la ciudad de Luoyang no dudó en infringir su privacidad y saqueó los dormitorios y buscó entre sus pertenencias.
El 15 de abril se envió un aviso al grupo de WeChat de los estudiantes: “Mañana, el colegio inspeccionará los dormitorios. Se buscará en los armarios. Las personas deben manejar los artículos relacionados con las creencias religiosas o los libros asociados por su cuenta. Si se descubren esos artículos, sus propietarios serán expulsados de la Liga Juvenil Comunista, serán reportados al Comité Central de la Liga Juvenil Comunista y el asunto quedará registrado en su expediente”.
Más tarde, se anunciaron en el grupo de WeChat las reglas detalladas para evaluar los dormitorios. Una de las regulaciones declaraba: “Los miembros de los dormitorios aman al Partido y al país, muestran disciplina y se guían por la ley, y salvaguardan conscientemente la estabilidad de la escuela, no creen en rumores, no creen en la religión y no difunden el pensamiento religioso”.
Los libros que contienen alguna referencia a la religión en el título, como un santo o una cruz e, incluso, artículos relacionados con la fe, como cortinas con el símbolo de la luna creciente y la estrella del islam, fueron colocados en una lista de artículos prohibidos.
“Algunas veces, la escuela inspecciona los dormitorios, pero siempre era para examinar la higiene. Esta vez, la atención se centra en la creencia religiosa. Incluso hurgaron en nuestros armarios. Eso es demasiado”, dijo un estudiante de la escuela, expresando una enorme insatisfacción.
Otro estudiante comentó: “No se permite que haya artículos relacionados con la religión en los dormitorios. A los estudiantes se les exige que no crean en la religión y que no lleven a cabo labor misionera; sólo pueden amar al país y al Partido. ¡Qué libertad religiosa, ni qué nada! ¡Todo es una mentira!”.
A mediados de mayo, en preparación para una inspección por parte del Departamento de Trabajo del frente Unido del comité provincial, una universidad de la ciudad de Zhengzhou recogió todos los libros que trataban sobre creencias religiosas que se encontraban en la sala de consulta de la biblioteca y los pusieron bajo llave.
Al mismo tiempo, la Universidad de Medicina Tradicional China de Henán, ubicada en el distrito universitario de Longzihu en la ciudad de Zhengzhou, llevó a cabo una investigación exhaustiva acerca de las creencias religiosas de los estudiantes. Desde el momento en el que entraron a la escuela, los estudiantes religiosos han sido estrictamente controlados por la administración. La escuela los ha mandado llamar en repetidas ocasiones para interrogarlos, ha hecho “transformación ideológica por medio de la educación” y los ha forzado a firmar una declaración de que “ya no creerán en la religión”.
Las creencias religiosas de los maestros son investigadas ampliamente
De acuerdo con un maestro de una universidad de la ciudad de Zhengzhou, el equipo central de inspección religiosa ha emitido cinco requisitos específicos a las autoridades de Henán acerca de cómo investigar a las personas de fe. Se refieren a un plan de rectificación religiosa en cinco sentidos: verificación de cada persona, materiales de enseñanza y casas; gestión de actividades de intercambio y actividades grupales dentro y fuera de las escuelas; prevenir las líneas de defensa ideológicas, organizacionales e institucionales; combatir el crimen de pandillas y eliminar el mal, y educar –esto es, establecer– la moralidad e instruir a las personas.
“El Departamento de Educación está verificando de manera estricta el estatus de la religión en las escuelas. El Departamento de Seguridad está monitoreando nuestra universidad”, dijo el maestro. “Cada persona es investigada. A las personas religiosas se les advierte que revelen su fe; si la escuela los descubre, las consecuencias podrían ser todavía más graves”.
“Los empleados del Departamento de Seguridad de la escuela visitarán la casa de los maestros sospechosos para investigar y llevar a cabo indagaciones”, explicó el profesor. También reveló que la administración de la universidad alienta las delaciones y recoge chismes para determinar si los maestros o sus familiares inmediatos tienen creencias religiosas, lo cual se considera un asunto político.