El PCCh gana impulso en sus esfuerzos por eliminar al budismo independiente. Con diversos pretextos, se destruyen templos y estatuas y a los monjes se les dice que “regresen a casa”.
por Ye Jiajia
Mientras las campañas del PCCh (Partido Comunista Chino) para demoler iglesias de las Tres Autonomías aprobadas por el Estado y desmantelar cruces continúan en todo el país, en la provincia oriental de Shandong el Gobierno local está fijando la mirada en los templos budistas, como el templo de Huaizi, ubicado en la villa de Huaizi’an del condado de Pingyi, bajo la jurisdicción de la ciudad de Linyi. El templo, que se construyó en 2016 en la cavidad de una montaña, era famoso en el área y visitado a menudo por los creyentes.
Ahora ya no ocurre así: el PCCh ordenó que lo demolieran aduciendo que estaba “ocupando un terreno de forma ilegal”. El director del templo trató de preservarlo mediante la negociación con funcionarios del Gobierno local e, incluso, escribió una carta donde ofrecía donar el templo al Estado, sin devolución, pero no sirvió de nada.
El 23 de mayo, el Gobierno local contrató a personas para que arrastraran todas las estatuas budistas que se encontraban dentro del templo a dos vehículos grandes. Y, a las 2 a.m. del 24, más de 50 empleados, incluyendo el secretario del Partido del condado y agentes de policía armados llegaron al templo de Huaizi con tres excavadoras. Establecieron un punto de control policial en el que cuatro agentes protegían cada extremo del camino a la montaña que lleva al templo y prohibían a todos acercarse. A mediodía del día siguiente, los salones palaciegos del templo se convirtieron en un montón de escombros.
Huaizi no era el único templo destinado a la destrucción. El templo budista de Dabei (大悲禪寺), ubicado en el distrito de Laoshan de la ciudad de Qingdao, también fue cerrado por la fuerza. En 1959 el templo colapsó, pero fue reconstruido en 2011. Ahora, todas las estatuas budistas han sido desmanteladas y el abad y varios monjes del templo han sido repelidos.
El 21 de junio, funcionarios de diversos departamentos gubernamentales dirigieron una grúa para que irrumpiera en el templo. Después de nueve días, 101 estatuas de arhats y una estatua de Guanyin fueron desmanteladas. Las estatuas budistas desmanteladas están ahora apiladas en un espacio al aire libre dentro del templo y han sido cubiertas con una lona. El incensario quedó bajo tierra.
“No se puede hacer nada al respecto. Esto está ocurriendo a nivel nacional. Es una orden que dio Xi Jinping”, contó un creyente a Bitter Winter. “¿Quién se atrevería a desobedecer? El Partido Comunista no permite que las personas crean en nada; sólo se les permite creer en el comunismo. ¿Cuál es el inframundo criminal que mencionan? El mayor inframundo criminal es el Partido Comunista”.
El 4 de julio, una estatua budista que estaba en un templo, también localizado en el distrito de Laoshan de la ciudad de Qingdao, fue desmantelada violentamente. Seis personas enviadas por el Gobierno del poblado destruyeron la estatua budista con mazos de hierro. La cabeza de la estatua budista fue cortada y el cuerpo fue hecho pedazos.
Video: una estatua budista que se encontraba dentro del templo en el distrito de Laoshan fue destruida.
“Todas las estatuas budistas deben ser desmanteladas. El Gobierno está exigiendo que así se haga”, dijo un habitante de la villa. “Es una política nacional; no hay nada que podamos hacer al respecto. A partir del año pasado, las cosas han sido como en la Revolución Cultural”.
La lista de templos demolidos o transformados es interminable. Los templos en Jinan, Zibo, Tai’an y en otras áreas también han sido sometidos a represión.
En la villa de Woluozi, bajo la jurisdicción de la ciudad de Pingdu, el Departamento de Asuntos Étnicos y religiosos ordenó que el templo de Yuanming fuera cerrado con el pretexto de “reformar” el taoísmo y el budismo. Al igual que ocurrió con los demás, todos los incensarios y estatuas budistas del templo fueron cubiertos con placas rojas de acero galvanizado. Los monjes que habían estado viviendo en el templo por varios años también fueron forzados a dejarlo y a regresar a la vida secular.
El 22 de abril, un monje de otro templo en la misma ciudad recibió un aviso por parte del Departamento de Trabajo del Frente Unido donde se le exigía que ese día se mudara del templo de Chenghuang. Habían pasado muchos años desde que dejó su casa para convertirse en monje y no tenía un hogar al cual regresar. Así pues, algunas personas de buen corazón lo ayudaron a esconderse. Ahora, vive con miedo y no se atreve a salir a la calle.