Las tiendas y restaurants son despojados de los símbolos de luna creciente y estrella y otros, así como también de los escritos en árabe, ya que el PCCh refuerza su plan de «sinicizar» a los musulmanes de China.
por Hu Ke
A fin de lograr su plan quinquenal (del 2018 al 2022) tendiente a «sinicizar» a todos los musulmanes fuera de Sinkiang, el PCCh está reprimiendo la cultura islámica a lo largo de todo el país. Esta campaña masiva continuó incluso en medio del pico del brote de coronavirus, también en la provincia suroccidental de Yunnan.
Desde marzo hasta mayo, en Chuxiong, la capital de la Prefectura Autónoma Yi de Chuxiong, en la provincia, se pintaron o cubrieron los símbolos islámicos y los escritos en árabe de los letreros de 70 negocios operados por personas de etnia hui.
Según algunos propietarios de tiendas, funcionarios de varias instituciones estatales, entre ellas la Agencia de Seguridad Pública, la Agencia de Gestión Urbana y la Agencia de Asuntos Étnicos y Religiosos, les ordenaron quitar los símbolos de sus letreros o reemplazarlos por completo. De lo contrario, sus licencias comerciales serían revocadas. Los funcionarios locales afirmaron que la orden provenía del Gobierno central y que la campaña de remoción de letreros estaba siendo aplicada a nivel nacional.
«Se nos notificó verbalmente, no se nos mostró ningún tipo de documento», explicó el dueño de la tienda. «Un funcionario de la Agencia de Asuntos Étnicos y Religiosos nos dijo que había un documento que exigía purgar los escritos en árabe en todo el país».
«El Gobierno está reprimiendo nuestra fe, pero no tenemos forma de razonar con ellos», afirmó el dueño de un restaurante de barbacoa. «Si las personas de etnia hui tratáramos de discutir con los oficiales, nos llamarían alborotadores y nos arrestarían inventando algún cargo falso».
«En Chuxiong, difícilmente se pueden hallar escritos en árabe, y el Gobierno también prohíbe que las escuelas impartan las clases en árabe» un imán local le expresó su preocupación a Bitter Winter. «Todas las mezquitas serán rectificadas, y el pueblo hui será completamente ‘sinizado’ en menos de 50 años».
Un panadero procedente del condado de Lufeng de la prefectura expresó preocupaciones similares. El mismo afirmó que desde diciembre hasta mayo, se retiraron los símbolos islámicos de los letreros de 62 tiendas halal del condado. «El Estado está fuera de control, al igual que durante la Revolución Cultural», continuó afirmando el panadero. «El Departamento de Trabajo del Frente Unido ordenó retirar las cúpulas de todas las mezquitas. Fuera de ellas, a los hombres de etnia hui no se les permite llevar gorras blancas y a las mujeres se les prohíbe usar velos. Los musulmanes hui desaparecerán en dos o tres generaciones».
Los letreros de 176 negocios operados por personas de etnia hui en Songming, un condado de la capital provincial Kunming, fueron «sinizados» en el mes de mayo. Según un residente del condado, la campaña había comenzado seis meses antes.
«Mi negocio se vio sumamente afectado luego de que los símbolos halal fueran cubiertos con pintura», afirmó el propietario de un restaurante. El mismo explicó que como los ancianos de etnia hui sólo pueden leer en árabe, luego de la modificación de los letreros, no pueden entender lo que está escrito en chino y no se atreven a ingresar a su restaurante al no saber si es halal.
Los residentes de la aldea de Huaguang de la ciudad de Yuxi son principalmente personas de etnia hui. El pasado mes de diciembre, el Gobierno retiró por la fuerza la cúpula y los símbolos de luna creciente y estrella del arco conmemorativo de la entrada de la aldea. Según algunos aldeanos, el Gobierno quería convertir el arco en una estructura de estilo chino.
«El Gobierno afirma que los musulmanes somos terroristas y nos reprime», afirmó con ira un aldeano, al referirse al arco modificado. «Todo lo relacionado con el islam está siendo controlado y rectificado a lo largo de todo el país. El Partido Comunista hace lo que le place y no tenemos derecho a oponernos».
«Debemos acatar las órdenes del PCCh, pero si deciden demoler las mezquitas no volveremos a ceder», afirmó otro residente de etnia hui decidido a defender su fe.