El año pasado, no solo las iglesias domésticas no registradas, sino también varias iglesias de las Tres Autonomías controladas por el Estado emplazadas en Hubei sufrieron severas represiones.
por Cai Congxin
En el año 2019, previo a las inspecciones de trabajo religioso del Gobierno central, las autoridades de toda la provincia central de Hubei intensificaron las medidas represivas contra los lugares de culto, dando como resultado numerosas clausuras de iglesias. De marzo a octubre, al menos 40 iglesias protestantes fueron reprimidas solo en Wuhan, la capital de Hubei. Bitter Winter ha recibido más información sobre los ataques perpetrados contra lugares de culto protestantes –tanto iglesias domésticas como iglesias de las Tres Autonomías–.
Un lugar de reunión fue demolido tras engañar a la persona a cargo del mismo
El 2 de mayo, funcionarios del Gobierno del poblado de Yanwo, administrado por la ciudad a nivel de condado de Honghu, ordenaron demoler una sede perteneciente a la Iglesia de las Tres Autonomías, alegando que su «certificado era deficiente». Ante las protestas de los miembros de la congregación, los funcionarios tuvieron que dar el brazo a torcer. Aun así, insistieron en quitar la cruz de la iglesia a cambio de salvar el edificio.
Ocho días después, un funcionario del Gobierno del poblado se acercó nuevamente a la persona a cargo del lugar para decirle que el edificio debía ser demolido «para implementar las políticas del Estado». Para convencerla de firmar el acuerdo de demolición, el funcionario le prometió una compensación. El lugar fue demolido esa misma noche.
Un testigo ocular le dijo a Bitter Winter que los creyentes les suplicaron a los funcionarios que no les quitaran su lugar de culto, pero a pesar de ello, el lugar fue convertido en escombros. Como era de esperar, la congregación no recibió ningún tipo de compensación por parte del Gobierno. «La promesa de compensación obviamente fue un truco para hacer que los creyentes bajaran la guardia», comentó un aldeano.
A fines de marzo, funcionarios gubernamentales y oficiales de policía allanaron una iglesia doméstica emplazada en el distrito de Wuchang, en Wuhan. Un miembro de la congregación afirmó que al ingresar al lugar descubrió que todo estaba completamente desordenado: vidrios rotos por todas partes, el aire acondicionado y el proyector habían desaparecido, había un agujero en el techo y los letreros de la iglesia habían sido destrozados.
Las cruces desaparecen de las iglesias
En el mes de mayo, funcionarios del Gobierno provincial fueron a inspeccionar los preparativos de una carrera ciclista que se celebraría el mes siguiente en la montaña Huangpao del condado de Tongcheng. A uno de ellos le disgustó ver la imponente cruz que se hallaba situada en la parte superior de una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la aldea de Ditian, al pie de la montaña. El mismo le ordenó a la Agencia de Asuntos Religiosos del condado que la eliminara, afirmando que «lucía demasiado llamativa y que debía hacerla desaparecer de inmediato».
Poco después, el encargado de la iglesia recibió la orden de bajar la cruz, pero se negó a hacerlo. Los funcionarios lo presionaron, afirmando que la zona formaba parte de «una base revolucionaria y que no se permitían símbolos religiosos en la misma». «Si no la derribas, serás multado y arrestado», amenazaron a la persona a cargo de la iglesia. Poco después, la Agencia de Asuntos Religiosos contrató trabajadores para que demolieran la cruz.
La misma suerte corrió la Iglesia de Penggang, una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en el distrito de Huangpi, en Wuhan, luego de que funcionarios del Gobierno local ordenaran la demolición de su cruz el 9 de junio. Los mismos también confiscaron las biblias y le exigieron al presbítero de la iglesia que quitara el letrero y los dísticos cristianos, alegando que «está prohibido colocar símbolos religiosos en las iglesias». Los funcionarios le ordenaron al presbítero «estudiar la cultura tradicional china, los reglamentos del Partido Comunista Chino (PCCh) y las leyes estatales en lugar de la Biblia».
El mismo mes se desmanteló la cruz de otra iglesia de las Tres Autonomías emplazada en el distrito de Huangpi. Los funcionarios gubernamentales colocaron en la iglesia un póster sobre los nuevos Reglamentos sobre asuntos religiosos y le ordenaron al pastor de la misma, de aproximadamente 80 años, «estudiar el espíritu del Partido».
«No existen los derechos humanos en el país gobernado por el PCCh», le dijo un miembro de la congregación a Bitter Winter. «Solo el PCCh puede decidir qué está bien y qué está mal. Quiere manipular al mundo entero y hacer que todos lo adoren».
Se desmantelan letreros de iglesias y se adoctrina a los predicadores
La Verdadera Iglesia de Jesús ha estado padeciendo continuas represiones a pesar de haberse unido al Movimiento Patriótico de los Tres Autonomías hace años. En el mes de mayo, la Agencia Municipal de Asuntos Étnicos y Religiosos de Wuhan emitió una notificación en la que se ordenaba la remoción de los letreros de la «Verdadera Iglesia de Jesús» existentes en toda la ciudad, amenazando con demoler las iglesias que se negaran a hacerlo. Como consecuencia de ello, todos esos letreros han sido eliminados.
El 4 de noviembre, el Gobierno del distrito de Jiangxia, en Wuhan, organizó una capacitación para predicadores de 37 iglesias de las Tres Autonomías. Durante el evento, los funcionarios les exigieron a los miembros del clero que expusieran los valores socialistas centrales junto a la Biblia, amenazando con quitarle el certificado de predicación al que se atreviera a desobedecer y clausurar sus iglesias.
«El PCCh combina los valores socialistas centrales con la Biblia, con el objetivo de cambiar la esencia de nuestras creencias y obligarnos a aceptar los valores del Partido Comunista. Al final, solo se nos permitirá adorar al Partido Comunista. Son verdaderamente siniestros», comentó uno de los predicadores.
