A fin de acelerar la «sinización» de la religión, el régimen chino obliga a los predicadores a adoctrinar a las congregaciones y convierte los lugares de culto en centros de propaganda.
por Zhou Xiaolu
Descalificados por «desobedecer»
A principios de noviembre, el presidente del Movimiento de las Tres Autonomías del condado de Jianli de la ciudad de Jingzhou, en la provincia central de Hubei, anunció durante una conferencia que a 12 predicadores locales se les había prohibido predicar por «haber impartido sermones contrarios a los reglamentos gubernamentales». Es decir, no habían obedecido las exigencias de la Agencia de Asuntos Religiosos.
Un predicador de la zona explicó que, según lo exigido por la Agencia, los miembros del clero de la Iglesia de las Tres Autonomías deben predicar sobre los valores socialistas centrales y la cultura tradicional china, los cuales son dos de los «cuatro requisitos» impuestos para «sinizar» la religión emitidos por el Partido Comunista Chino (PCCh) en el año 2018. Desde entonces, los clérigos de toda China han sido sometidos a adoctrinamiento y capacitación obligatorios.
A finales de mes, la Agencia de Asuntos Religiosos del condado de Dancheng, administrado por la ciudad de Zhoukou en la provincia central de Henán, organizó una capacitación de 5 días de duración para más de 200 predicadores locales sobre la integración de la cultura tradicional china en los sermones.
Según un funcionario a cargo de la capacitación, el PCCh tiene como objetivo controlar la propagación de la religión debido a que el creciente número de creyentes amenaza su régimen. El Estado intenta por todos los medios posibles hacer que todos los creyentes acepten el liderazgo del Partido y se movilicen en torno al Comité Central bajo el mando del presidente Xi Jinping, añadió la fuente.
Una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la ciudad de Sanmenxia de Henán había planificado una capacitación interna para su personal clerical el 10 de noviembre. Luego de que la Agencia de Asuntos Religiosos local se enterara de ello, contrataron a un instructor para que hablara sobre la cultura tradicional china durante la misma.
«Actualmente, todas las iglesias deben impartir sermones de acuerdo con los requisitos gubernamentales», afirmó con impotencia un predicador local. “Una vez que se haya instalado un equipo de vigilancia en cada una de las iglesias, la Agencia de Asuntos Religiosos podrá monitorear el contenido de cada sermón. Los que no prediquen de acuerdo a las exigencias gubernamentales serán sancionados”.
El predicador también le dijo a Bitter Winter que a una predicadora de la Iglesia de las Tres Autonomías procedente de la ciudad a nivel de condado de Lingbao en Sanmenxia, se le prohibió predicar sobre la Biblia luego de que los funcionarios de la Agencia consideraran inapropiado su sermón sobre el Apocalipsis. Solo se le permitió hablar sobre el patriotismo y la cultura tradicional de China. Si desobedecía, su iglesia podría ser clausurada. Al no tener otra opción, la predicadora tuvo que participar en una capacitación organizada por el Gobierno a pesar de creer firmemente que los lugares de culto solo deben ser utilizados para adorar a Dios.
Al intentar evadir la persecución y complacer al Gobierno, los sermones de algunos miembros del clero hacen reír a las congregaciones. Un pastor de la Iglesia de las Tres Autonomías procedente de la ciudad de Changchun en la provincia nororiental de Jilin declaró durante un sermón impartido en el mes de septiembre que «los valores socialistas centrales son la voluntad de Dios».
Los símbolos cristianos son eliminados por la fuerza
«El Gobierno adoctrina a las personas y erosiona nuestras enseñanzas, con el objetivo de erradicar el cristianismo», comentó un cristiano de edad avanzada procedente de Changchun.
A fin de acelerar este proceso de erradicación, las autoridades continúan reemplazando los símbolos religiosos existentes en los lugares de culto y en los hogares de los creyentes con consignas del PCCh y citas de Xi Jinping.
Un miembro de la Iglesia de las Tres Autonomías procedente de Changchun le dijo a Bitter Winter que, en octubre del 2018, el Gobierno estableció una librería cultural en su iglesia, la llenó con materiales propagandísticos que promovían el pensamiento de Xi Jinping y el maoísmo, y eliminó las pinturas religiosas y las cruces existentes en la misma.
En septiembre de 2019, el letrero que decía «Dios Todopoderoso creador de todas las cosas» que estaba colocado en el muro exterior de la Iglesia de Yongfeng emplazada en el condado de Luonan, en la provincia noroccidental de Shaanxi, fue reemplazado por los caracteres chinos que significan «ama al país». La iglesia se vio obligada a exhibir en su interior los nuevos Reglamentos sobre Asuntos Religiosos. Los miembros de la congregación estaban enojados por la forma en que la iglesia había sido rectificada. «Parece una agencia gubernamental, no una iglesia», se lamentaron los creyentes.
En diciembre de 2018, una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en la aldea de Tongdi del condado de Heyang, en la ciudad de Weinan de Shaanxi, fue despojada de sus cruces, de las pinturas que contenían la imagen de Jesús y de los versículos de la Biblia.
En octubre de 2019, la Agencia de Asuntos Religiosos de la ciudad de Zhuji, en la provincia oriental de Zhejiang, colocó una consigna en la que se promovían los valores socialistas centrales y copias del Diario Popular, el periódico oficial del Comité Central del PCCh y otros materiales en los que se citaba a Xi Jinping en un iglesia adventista del séptimo día local. Los funcionarios de la Agencia la proclamaron una «iglesia armoniosa».