El gobierno ha despedido a líderes de iglesias en Henán por no implementar suficientemente las políticas centrales del gobierno.
por Jiang Tao
Después de la implementación de la nuevo Reglamento sobre Asuntos Religiosos, las políticas de gestión de la religión al estilo de la Revolución Cultural están de vuelta en todas las ciudades y provincias de China. Bitter Winter recibió una copia de un documento interno confidencia publicado por el Departamento de Asuntos Religiosos de la Provincia de Henán, el cual hace una lista de las causas y circunstancias relacionadas con el despido de un imam (persona que dirige las plegarias en una mesquita), de un monje superior budista y de 14 miembros del clero que pertenecen a la Iglesia de las Tres Autonomías, una iglesia protestante controlada por el gobierno, en la provincia de Henán entre febrero y mayo de 2018.
A Yin Zhiqiang y Wang Shisen, ambos de templos de la Iglesia de las Tres Autonomías en el condado de Fengqiu, en la ciudad de Xinxiang, se les pidió que se marcharan por no cumplir con sus deberes directivos de exigir al pie de la letra la regla de que los menores no pueden entrar al templo y por la distribución de publicaciones no aprobadas.
Miao Jingjiu, del condado de Taiqian en la ciudad de Puyang, así como Zhao Minxia y Huang Bao’an de Lingbao, ciudad de Sanmenxia, fueron detenidos para ser interrogados y más tarde despedidos por habérseles encontrado en sus templos materiales de formación para menores, entre otros cargos.
Otras razones mencionadas en el documento en relación con estos despidos son la falta de cooperación con la campaña especial de las autoridades contra la religión; ser indolentes para implementar en su iglesia tareas de rectificación como retirar la cruz del templo; organizar excursiones para el coro del templo etcétera.
En octubre de 2012, el pastor Pu Wanming, del Templo Choayang de la Iglesia de las Tres Autonomías, junto con su esposa, fue despedido de manera similar, lo cual recibió una amplia cobertura en los medios internacionales en aquel momento.
Las iglesias controladas por el gobierno habían estado relativamente protegidas hasta la reciente represión contra las religiones después de que el presidente Xi Jinping tomara el poder. Algunos analistas creen que, con el régimen actual, incluso las iglesias oficiales seguirán sufriendo la misma persecución y abuso que las así llamadas iglesias clandestinas han sufrido por años.