Ya no se permite el envío de máscaras, cascos, paraguas y otros artículos «sensibles» desde China Continental a Hong Kong y regiones vecinas.
por Zhang Wenshu
Las autoridades chinas han sofocado las protestas en Hong Kong con todas sus fuerzas, introduciendo continuamente nuevas medidas de control y represión destinadas a acabar con las manifestaciones. Para poder resistir los ataques con gases lacrimógenos y balas de goma y protegerse de la brutalidad policial, los manifestantes necesitan urgentemente máscaras faciales, cascos y otros equipos de protección, los cuales cada vez son más difíciles de conseguir en la región administrativa especial.
Poniendo en peligro la seguridad nacional
Para asegurarse de que dichos artículos no lleguen a Hong Kong, el Partido Comunista Chino (PCCh) ha implementado estrictas medidas tendientes a controlar las ventas en línea y los envíos desde el continente. Como consecuencia de ello, al menos 20 vendedores de excedentes militares en Taobao, un sitio web chino de compras en línea, propiedad del conglomerado multinacional Alibaba, dejaron de vender cascos, escudos, chalecos protectores y otras mercancías «sensibles» similares a Hong Kong.
Se les ha prohibido a todas las empresas de logística y mensajería chinas enviar los artículos regulados a Hong Kong y a otras áreas vecinas, tales como las ciudades de Zhuhai y Shenzhen en la provincia de Cantón o Xiamen en la provincia de Fujian. Desde entonces, todos los paquetes dirigidos a estos destinos son inspeccionados y sus remitentes deben registrar su nombre completo y la información de su tarjeta de identificación.
El 13 de agosto, la policía del distrito de Chengyang de la ciudad de Qingdao, en la provincia oriental de Shandong, convocó a las empresas de logística locales para una reunión y les informó que no se permite el envío de cuchillos, pistolas de juguete, cascos de seguridad y otros artículos «peligrosos» a Hong Kong y a las localidades vecinas. Si se descubren dichos objetos, el infractor será arrestado por poner en peligro la seguridad nacional. Además, todas las empresas de mensajería deberán conservar los registros de vigilancia durante al menos tres meses.
Castigado bajo la Ley Antiterrorista
En China, las compañías navieras y de mensajería comenzaron a adoptar medidas para implementar las políticas gubernamentales. El 15 de agosto, STO Express, una empresa de mensajería china, emitió la Notificación urgente sobre la prohibición de recolección y envío de artículos de mensajería sensibles a las regiones de Hong Kong y Cantón. La notificación enumera 15 categorías de artículos «sensibles» que no pueden ser recogidos de los remitentes y enviados a Hong Kong y Cantón, siendo las mismas: máscaras, cascos, camisetas impresas con diseños o textos sensibles, tirachinas, acero, pistolas de imitación, bastones de senderismo , palas de hielo, alicates, lámparas de radiación de luz brillante, gafas, protectores, máscaras faciales, paraguas de mango largo y botellas de vidrio.
La notificación estipula que durante cada etapa operativa del envío, cualquier artículo de la lista deberá ser interceptado y devuelto al remitente al momento de ser descubierto, y el remitente deberá ser informado de acuerdo con los procedimientos implementados en los casos de contrabando descubierto.
Para garantizar el cumplimiento de esta regulación, la empresa ha introducido estrictas sanciones para sus empleados. Si se recogiera un paquete de mensajería «sensible», los culpables serán castigados con sanciones impuestas en casos de violaciones relacionadas con contrabando. Si la situación «conllevara graves consecuencias», la sucursal que haya recogido el paquete será investigada por los departamentos gubernamentales pertinentes de acuerdo con la Ley Antiterrorista.
Un agente de servicio al cliente de STO Express le dijo a Bitter Winter que, debido a las restricciones, casi no se podía enviar nada. «El volumen de entrega de la empresa se ha reducido drásticamente, resultando en pérdidas financieras», afirmó el agente.
A pesar del daño a su capital, las empresas de mensajería no tienen más remedio que cumplir con las regulaciones restrictivas, en caso contrario, deberán enfrentar severas sanciones. El mismo agente de servicio al cliente de STO Express reveló que en abril, durante las celebraciones del Día de la Armada en Qingdao, una empresa fue multada con 50 000 yuanes (aproximadamente 7000 dólares) por enviar un artículo prohibido.
Para evitar sanciones, todos los agentes de servicio al cliente deben escanear e inspeccionar los paquetes antes de aceptarlos y asegurarse de que se utilicen los nombres reales del remitente y del destinatario.
Perspectiva continental: no apoyar a los «alborotadores por la independencia de Hong Kong»
El mundo entero ha seguido de cerca las protestas llevadas a cabo en Hong Kong, pero en China Continental, el público en general sabe muy poco sobre el asunto. El «Gran Cortafuegos de China» ayuda al PCCh a controlar y bloquear toda la información en línea procedente del exterior, y las autoridades difunden información falsa, distorsionan la realidad y retratan a los manifestantes como «alborotadores por la independencia de Hong Kong», para incitar el sentimiento nacionalista y antioccidental.
Como parte de la guerra informativa, el Gobierno comenzó a hacer circular videos incendiarios en China Continental, elogiando las medidas que garantizan que los artículos prohibidos, muy necesarios para los manifestantes, no lleguen a Hong Kong.
«China Continental está controlando completamente el flujo de artículos prohibidos a Hong Kong», afirma uno de los videos. “Todas las empresas de logística y mensajería prohíben el envío de artículos prohibidos a áreas clave. Esta iniciativa corta por completo los canales a través de los cuales las organizaciones independentistas de Hong Kong obtienen suministros. Las mismas no podrán comprar armas para continuar con los disturbios. Los suministros que necesitan no pueden ser enviados. ¡Al cortar los suministros de material estarán completamente aislados!”.
El video que circula ampliamente en China Continental incluye una retórica incendiaria, refiriéndose a las protestas de Hong Kong como «disturbios»:
Tal y como señaló The New York Times en su artículo del 14 de agosto, “El resultado, tanto en China Continental como en el extranjero, ha sido crear una versión alternativa de lo que, visto desde Hong Kong, es claramente un movimiento de manifestación popular. En la versión china, una pequeña y violenta banda de manifestantes, que no cuentan con el apoyo de los residentes, provocada por agentes extranjeros, se está desenfrenando, reclamando la independencia de Hong Kong y destrozando a China».