El gobierno de la ciudad de Gongyi, en Henán, tomó medidas especiales para evitar que periodistas extranjeros obtengan información sobre creencias religiosas en la provincia, revela un documento interno oficial. La sesión informativa sobre una operación especial, emitida el 4 de junio, está dedicada a una visita planeada por periodistas de Associated Press (AP), una agencia de noticias con sede en los Estados Unidos, y utiliza frases como «convencerlos y aconsejarles que regresen», «estricta vigilancia», «seguimiento de objetivos» y «no hay entrevistas no aprobadas» para delinear contramedidas contra posibles filtraciones de información sobre la represión de las creencias religiosas en China.
La sesión informativa se dio a conocer al día siguiente, después de que el gobierno de la ciudad convocara una reunión especial de coordinación para discutir y organizar planes de trabajo para contrarrestar los intentos de los reporteros de AP de realizar entrevistas sobre creencias religiosas en Henán. El Departamento de Publicidad de la ciudad del Comité del PCCh y la Oficina de Asuntos Exteriores municipales, han llevado a cabo una sesión de preguntas y respuestas sobre cómo manejar adecuadamente las entrevistas de AP; esbozaron las precauciones necesarias para lidiar con el trabajo de los periodistas.
En la reunión, todas las ciudades, subdistritos y unidades de trabajo pertinentes aclararon sus responsabilidades y crearon planes sobre cómo utilizar las leyes y regulaciones chinas para convencer y aconsejar a los reporteros de AP de que regresen. Los participantes de la reunión enfatizaron la importancia de la coordinación estrecha y del intercambio de información con hoteles, estaciones e intersecciones como puntos de interés particulares para garantizar la detección e información oportuna. Se ordenó a las aldeas y a los poblados que reforzaran a sus cuadros y vigilaran de cerca sus iglesias. Se les ordenó que revisaran cuidadosamente la identidad de los extranjeros y rastrearan los objetivos identificados. No debía permitirse que el personal de las iglesias y los grupos religiosos concedieran entrevistas sin permiso, para garantizar que las cuestiones religiosas en la ciudad se presenten como armoniosas y estables. Los resultados de la reunión debían ser transmitidos rápidamente.
Desde el comienzo de este año, la provincia de Henan ha sido testigo de una de las más duras ofensivas contra la religión en el país: innumerables iglesias clausuradas, cruces desmanteladas y creyentes arrestados. La persecución contra las creencias religiosas por parte del Partido Comunista Chino ha sido expuesta en numerosas ocasiones en los medios de comunicación fuera de China, lo que trajo como consecuencia la condena de la comunidad internacional. Por ello, las autoridades del partido están prestando especial atención a los intentos de la prensa extranjera de informar sobre la represión contra las creencias religiosas.
Información de Jiang Tao