Tras haber superado una investigación a principios de este año, el Colegio Rehoboth, ubicado en la provincia de Liaoning, reabrió sus puertas, pero pronto se vio obligado a cerrar definitivamente en medio de amenazas de detención contra su director.
A principios de julio, Bitter Winter informó que el Colegio Rehoboth, ubicado en la ciudad de Shenyang, al noroeste de la provincia de Liaoning, fue clausurado durante dos meses por su afiliación religiosa. Tres de sus instructores extranjeros fueron deportados de China.
Se reanudaron las clases, pero las autoridades seguían sospechando que los maestros profesaban la fe cristiana y decidieron vigilar el colegio las 24 horas del día. Funcionarios del Gobierno solían interrumpir las clases y preguntar si los estudiantes tenían Biblias. También hostigaron a los responsables del colegio para que eliminaran la cruz de la insignia de la institución.
A finales de septiembre, el Gobierno local envió una notificación exigiendo que la escuela cerrara antes del 8 de octubre. En la notificación también se indicaba que la palabra “Rehoboth”, que hace referencia a tres lugares bíblicos, debía eliminarse del letrero a la entrada del colegio. Se advertía además que el incumplimiento de las órdenes daría lugar a la detención del director. Los administradores decidieron cerrar el colegio poco después.
Aunque parezca increíble, según el director, el Gobierno local fue el que lo animó a abrir la escuela hace varios años. Invirtió más de 10 millones de yuanes (casi millón y medio de dólares) mientras el colegio permaneció abierto y se mostró profundamente decepcionado al tener que cerrarlo por la campaña del Partido Comunista contra la fe religiosa.
Los estudiantes de la escuela eran sobre todo jóvenes que habían nacido en Estados Unidos y vuelto a China con sus familias. Al estar acostumbrados al estilo de aprendizaje libre estadounidense, los padres tienen dificultades para encontrar un colegio adecuado para sus hijos tras el cierre del Colegio Rehoboth.
Informado por Piao Junying