Los miembros de su congregación y los líderes de la Iglesia han sido acosados durante mucho tiempo. Durante el último allanamiento, la policía también confiscó el dinero de las donaciones.
En la provincia de Sichuan, situada en el suroeste de China, la policía allanó recientemente una Iglesia doméstica emplazada en la ciudad de Langzhong. Chen Yuhong (seudónimo) estaba celebrando en su hogar una reunión de la Iglesia, a la cual habían asistido más de 60 creyentes, cuando 17 policías se presentaron en su puerta.
Los oficiales nunca presentaron ninguna orden para llevar a cabo el allanamiento y las pesquisas. Los mismos estaban equipados con escáneres, con los cuales pudieron identificar a cada uno de los creyentes presentes en el lugar. También tomaron fotos de ellos y registraron sus datos de identificación.
Las Biblias de la Sra. Chen, una pieza de joyería, con un valor de 3000 yuanes (o 430 dólares), y 2000 yuanes (o 280 dólares) pertenecientes al dinero de las donaciones de la Iglesia también fueron confiscados. Posteriormente, la Sra. Chen y el predicador de la Iglesia, Ren Xinyi (seudónimo), fueron encarcelados en el centro de detención local. Mientras que ella fue liberada a los cinco días de haber sido detenida, el predicador pasó dos semanas en prisión.
Entretanto, más de 50 creyentes fueron llevados a la estación de policía local para ser interrogados. Los mismos fueron liberados ese mismo día, pero los oficiales los amenazaron alegando que era ilegal celebrar reuniones privadas sin la aprobación del Estado y les dijeron: «La próxima vez recibirán una fuerte condena».
Según los informes, la Iglesia doméstica ha sido hostigada en varias oportunidades durante los últimos seis años. El primer allanamiento se llevó a cabo en el mes de mayo de 2012, y a pesar de que la Sra. Chen se encontraba embarazada en ese momento, fue convocada reiteradamente para ser interrogada. En diciembre de 2016, el predicador Ren fue detenido durante dos semanas.
Informado por Yao Zhangjin
