El clero perteneciente a la Iglesia de las Tres Autonomías se ve obligado a interpretar la Biblia a través del prisma de la cultura tradicional china; siendo dicha exigencia parte de la campaña del PCCh tendiente a hacer que las religiones sean "más chinas".
Ni siquiera los muertos pueden ser religiosos
La persecución china continúa incluso después de la muerte, ya que las autoridades quitan cruces y lunas crecientes de las lápidas.