Revista sobre \n la libertad religiosa y \n los derechos humanos en China
El objetivo del Gobierno chino es crear grupos "religiosos" con características propias del Partido mediante la transformación sistémica de su ideología.
El PCCh afirma que en cada “área” de la provincia es suficiente una iglesia de las Tres Autonomías. Las otras deberían ser “donadas” al Gobierno, que las usará con propósitos seculares.
En la provincia de Henán, las autoridades locales clausuraron iglesias, bloqueando sus entradas y destruyendo sus instalaciones.
Canciones revolucionarias y ópera tradicional china están reemplazando a las oraciones y a los himnos luego de que las autoridades toman por la fuerza iglesias aprobadas por el Gobierno.
Además de los omnipresentes sistemas de vigilancia, los creyentes en China también deben estar atentos al personal asignado por el Gobierno que los vigila las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
El PCCh les exige a los predicadores aprobados por el Estado que reemplacen la Palabra de Dios por la ideología comunista y los valores confucianos.
Las autoridades destruyeron una iglesia de las Tres Autonomías emplazada en un condado de Henán prometiendo reconstruirla, pero en lugar de cumplir su promesa, frenaron la construcción de una nueva.
Las autoridades de un condado en la provincia de Jiangxi están reconvirtiendo lugares de culto y convirtiéndolos en centros de propaganda del Partido.
Al ser la provincia con el número más importante de personas religiosas, Henán sigue sufriendo medidas enérgicas sobre sus iglesias al estilo de la Revolución Cultural.
Hasta reunirse con amigos en casa puede ser considerado por las autoridades chinas como una actividad religiosa sospechosa; los creyentes de las Iglesias oficiales no son la excepción.
Las autoridades de la provincia de Henán están llevando a cabo un exhaustivo examen de los predicadores pertenecientes a la Iglesia de las Tres Autonomías, con el objetivo final de deshacerse de los «antipatrióticos».
Otra iglesia protestante aprobada por el Gobierno emplazada en Henán fue víctima de la persecución religiosa llevada a cabo por las autoridades: la misma fue reducida a escombros en poco más de diez minutos.
Según informes, otras dos iglesias de las Tres Autonomías aprobadas por el Estado fueron demolidas, y sus activos y objetos de valor fueron saqueados durante la temporada navideña del año pasado.
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