Revista sobre \n la libertad religiosa y \n los derechos humanos en China
Un libro escrito por el politólogo estadounidense Carsten Vala responde a la pregunta de por qué algunas Iglesias domésticas son “toleradas” y otras son perseguidas en China.
Dai Xiaoqiang, un pastor de la provincia de Zhejiang, revela detalles de cuando fue detenido en una mazmorra de agua.
Del 10 al 25 de marzo de 2018, la policía de Suzhou implementó detenciones organizadas de creyentes. Uno de ellos era un anciano presbítero de una iglesia doméstica situada en una aldea en el condado de Xiao.
La líder de una iglesia doméstica cumple sentencia y su familia se queda sin dinero para pagar por sus comidas en prisión.
La cristiana ya había sido detenida en el pasado y se mudó a otra provincia con la esperanza de evitar nuevas persecuciones, pero las autoridades dieron con su paradero.
La policía de la provincia de Shandong clausuró una iglesia familiar siguiendo la implementación del nuevo Reglamento sobre Asuntos Religiosos.
Xin Shoudao, procedente de la provincia de Henan, se ha visto empobrecido después de pagar cuantiosas sumas en concepto de multas al gobierno chino durante el último año.
Dos pastores de una Iglesia doméstica fueron aprehendidos mientras predicaban en Sinkiang. Una colega intentó liberarlos, pero terminó detenida y torturada.
Fueron detenidos en una reunión de la Iglesia, esposados y trasladados a una comisaría. Algunos recibieron multas y otros permanecieron detenidos y fueron sentenciados.
Arrestada por sus creencias, la líder de una Iglesia doméstica pasó tres años en prisión recibiendo una brutal “formación” atea.
Tres colaboradores de una Iglesia doméstica fueron arrestados cuando celebraban una reunión religiosa; en el transcurso de la detención, los agentes de policía propinaron una paliza a dos de ellos.
Un miembro de una Iglesia de Henán ha sido sentenciado por su fe en tres ocasiones, lo que le ocasionó incapacidad mental y física.
Cinco miembros de la Iglesia doméstica de Qingdao, en la provincia de Shandong, fueron condenados a un año y cuatro meses de prisión y continúan siendo perseguidos después de su liberación.
No breaking news found!
