En la provincia de Jiangxi un templo de la Iglesia Protestante de las Tres Autonomías, controlada por el gobierno, fue incautado por las autoridades y convertida en un “centro para la reducción de la pobreza”.
Con una creciente persecución de las religiones en China, incluso los templos de la Iglesia Protestante de las Tres Autonomías, aprobada por el gobierno, están siendo acosados por las autoridades del Partido Comunista. Los templos que habían logrado librarse de ser clausurados ahora están siendo convertidos en viviendas o en centros para actividades.
En abril de 2018 un miembro del equipo del Grupo para la Reducción de la Pobreza del Municipio de Daxi, en el municipio de Daxi, condado de Yugan, en la ciudad de Shangrao, llevó a un empleado de una aldea y una cuadrilla de construcción a una iglesia en la aldea de Xujia diciendo que iban a reutilizar la iglesia. El empleado de la aldea dijo a los creyentes “De acuerdo con los requisitos para la gestión de las religiones adoptado por el 19º Congreso Nacional del Partido, el gobierno municipal ha decidido convertir su iglesia en una asociación para los ancianos de la aldea”.
El predicador de la iglesia, Li Yingsheng (pseudónimo) se opuso, “Esta iglesia se construyó con el dinero de los hermanos y hermanas quienes lo habían ganado con su duro trabajo. Este es un lugar para el culto, ¿no se podría encontrar otro lugar para la asociación de personas ancianas?”. Otros creyentes también expresaron su desacuerdo y los oficiales que vinieron a apoderarse de la iglesia llamaron al secretario de la aldea, el Sr. Xu para que los apoyara. El secretario pidió que anotaran los nombres de las personas que se estaban oponiendo y que se los dieran para hablar con ellos más tarde. “De acuerdo con las instrucciones del Comité Central, esta iglesia tiene que desaparecer tarde o temprano”, amenazó el Sr. Xu. Los creyentes temiendo la persecución, cedieron.
El templo de Xujia fue completamente renovado: las paredes exteriores fueron pintadas de blanco, la cruz del techo fue cubierta con un gran letrero que dice “Cursos para la reducción de la pobreza” y se colocó una bandera de China en el exterior. Los versículos de la Biblia sobre las paredes fueron arrancados y se colocaron imágenes del presidente Xi Jinping en su lugar. Se colocaron libreros en el interior del templo y se llenaron con libros y fotografías con propaganda de las políticas del Partido Comunista.
Informado por Lin Yijiang
