Con el fin de asegurarse de que sus actos arteros no se hagan públicos, las autoridades andan detrás de los delatores que los exponen. Las personas arrestadas podrían enfrentar severos castigos.
por Zhang Feng
Desde su fundación, Bitter Winter ha revelado numerosos documentos del Partido Comunista Chino (PCCh) que fueron la base de medidas enérgicas que se tomaron en contra de la religión a lo largo de China, ya fueran campañas provinciales para eliminar los lugares de adoración que no se encuentran bajo el control del Gobierno, la “sinificación” de musulmanes en Sinkiang y en otras partes o medidas enérgicas especiales sobre movimientos y grupos religiosos, como la Iglesia de Dios Todopoderoso. Los documentos han constituido la prueba irrefutable de las violaciones de las libertades religiosas y los derechos humanos por parte del PCCh perpetradas en contra de sus ciudadanos.
Muchos de los documentos expuestos no eran ultrasecretos ni se tenía la intención de tratarlos con el máximo nivel de confidencialidad. No revelaban todos los sucios detalles tras bastidores de los acuerdos del PCCh para reprimir a las religiones. Estos documentos simplemente representan una gota en el océano de los actos indebidos del PCCh.
De cualquier manera, esto ha tocado un punto sensible del PCCh. Para impedir que se expusiera la realidad de su persecución, el PCCh ha lanzado una operación para rastrear y perseguir a los delatores en China continental que proporcionan noticias y documentos gubernamentales a los medios y a otras fuentes, como Bitter Winter.
No es difícil entender por qué. En China, cualquier cosa que el PCCh crea que hará que las personas cuestionen al régimen se considera “confidencial”: desde información sobre desastres naturales y epidemias hasta protestas pequeñas en contra del Gobierno. La diseminación de dicha información “confidencial” y, ya no digamos, de las evidencias directas de la persecución religiosa y las violaciones a los derechos humanos por parte del PCCh, está prohibida.
Bitter Winter logró obtener algunos documentos sobre investigaciones exhaustivas para prevenir filtraciones, los cuales fueron emitidos en mayo y junio por grupos especializados dentro de los comités del Partido Comunista que están a cargo de la protección de los secretos en la provincia de Shandong, en Henán y en otras áreas del país.
Las disposiciones que se encuentran en los documentos demuestran que las acciones de prevención de filtraciones planeadas por el PCCh son extensas y se ha ordenado que se implementen a nivel de provincias, ciudades y condados. Algunos materiales también incluyen órdenes para investigar a las instituciones operadas por el Estado, como las universidades.
El personal que cuenta con acceso a la información secreta tiene la orden de pasar por un entrenamiento especializado y debe firmar “compromisos de confidencialidad”. Se prevé que se lleven a cabo visitas regulares de supervisión por parte de autoridades superiores para que verifiquen su trabajo. A su vez, la supervisión diaria del personal en los comités del Partido e instituciones gubernamentales se ve fortalecida al investigar su desempeño general y su asistencia, así como al asegurarse de que no recopilen y transmitan información confidencial a través de correos electrónicos, plataformas sociales de mensajería como WeChat y Weibo o a través de teléfonos móviles y aplicaciones. En el caso de los viajes al extranjero que haga el personal, también se investigan los detalles de los mismos.
Los documentos también llaman a una inspección amplia y minuciosa del almacenaje de documentos gubernamentales que se encuentran en papel y en memorias USB y discos ópticos, así como de la difusión en línea de dichos materiales.
Informantes de varios gobiernos locales han reportado a Bitter Winter que las autoridades de esos lugares han llevado a cabo investigaciones de asuntos relacionados con el archivo de documentos. Para prevenir que los documentos sean filtrados, a menudo se leen en voz alta en las reuniones y se prohíbe que se escriban en papel. Sólo se les permite tomar algunas notas a quienes están presentes en las reuniones.
Algunos gobiernos locales también han llamado a que se investigue “toda la recopilación de información de inteligencia y el robo de secretos [gubernamentales] por parte de fuerzas extranjeras hostiles”. El PCCh señaló a Bitter Winter como un “sitio web extranjero hostil” justo después de su creación en mayo de 2018, cuando publicamos un informe acerca de las medidas enérgicas sobre grupos cristianos surcoreanos en China, con base en un documento secreto.
De acuerdo con informantes del Gobierno, el PCCh da mucha importancia a los incidentes donde se filtran documentos internos a Bitter Winter y a otras fuentes. Todas las personas que pueden haber tenido contacto con estos documentos están bajo investigación. Para encontrar a los filtradores, las autoridades han llevado a cabo pruebas de huellas dactilares, utilizado detectores de mentiras, escaneado teléfonos celulares y otros equipos que pudieran utilizarse para tomar fotos.
Desde el año pasado, al menos 45 reporteros de Bitter Winter han sido arrestados; muchos siguen detenidos hasta la fecha. Incluso los familiares cercanos de los individuos sospechosos han sido investigados y arrestados. De acuerdo con una fuente dentro del Gobierno, aquellos que son acusados de “filtrar secretos de Estado” pueden enfrentar fuertes sentencias.