China combina tecnología de vigilancia de vanguardia con la tradicional represión comunista de estilo policial-estatal, para crear una distopía orwelliana del siglo XXI en la región de Sinkiang y más allá.
Maestros en el 2019: la política es más importante que la enseñanza
Estudios políticos, lenguaje restringido y tareas de «transformación»: los profesores asignados para trabajar en Sinkiang están siendo intensamente controlados, hecho que les causa depresión y ansiedad.